Economía

Sabadell quiere comprar ya Liberbank

La entidad que preside Josep Oliú ha dicho por activa y por pasiva que, si participa en el baile de fusiones, será “para ser un banco comprador”, descartando la posibilidad de ser absorbido por otro banco. Y en ello están. Por un lado, tal y como adelantó en exclusiva OKDIARIO, Sabadell entrará de lleno en la puja competitiva por BMN; y por otro, han comenzado a estudiar las sinergias y los excesos de capacidad que les podría conducir a la adquisición inminente de Liberbank.

Fuentes próximas a Liberbank han reconocido a este periódico que su incorporación a Sabadell es algo que está sonando cada vez con más fuerza en el seno de la entidad, mientras que desde Sabadell se apresuran a decir que “no hay nada oficial”, aunque lo cierto es que, según ha podido saber OKDIARIO, la compra de Liberbank es algo que se está estudiando y que, más pronto que tarde, podría dar lugar a que la entidad catalana abriera una due dilligence; término utilizado habitualmente en el ámbito de las adquisiciones empresariales para referirse al proceso de búsqueda de información sobre una empresa.

Dada la fuerza de los rumores, que suenan con más fuerza desde Liberbank que desde Sabadell, hasta el consejero de Presidencia y Participación Ciudadana del Principado de Asturias, Guillermo Martínez, ha señalado que no dispone «de elementos suficientes» para analizar la operación entre Banco Sabadell y Liberbank. El consejero, de este modo, rehusó pronunciarse acerca de la hipotética compra.

Liberbank presentará resultados anuales el próximo 24 de febrero, siendo la última entidad cotizada española que rendirá cuentas ante el mercado. Sabadell, por su parte, no ha sido capaz de mejorar sus resultados en 2016 y ha cerrado el ejercicio con un beneficio neto atribuido de 710,4 millones de euros, tan sólo un 0,3% más que el contabilizado en 2015. Las provisiones que ha tenido que realizar la entidad financiera para devolver a sus clientes las cantidades indebidamente cobradas por las cláusulas suelo hipotecarias y la caída de sus ganancias sin contar con la aportación del británico TSB han lastrado las cuentas del banco que preside Josep Oliú.

Según informó Sabadell en los estados financieros anuales remitidos a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el elemento positivo lo pone el margen de intereses (el que muestra la evolución del típico negocio bancario: prestar dinero y captar depósitos), que ha crecido un 19,8% situándose en los 3.837,7 millones de euros. Sin embargo, el margen bruto se ha reducido un 0,1% y el neto un 15,8%. Estas cifras corresponden al total del grupo, incluyendo la actividad bancaria de la entidad británica TSB, integrada en Sabadell.