Ravil Maganov (Lukoil): de poder sentarse en el Consejo de Repsol a morir tras ‘caer’ por una ventana

Ravil Maganov
Ravil Maganov, presidente de Lukoil, fallecido el jueves.

Se acercaban las navidades de 2008 y Repsol presentaba su Guía del siguiente año. El encuentro, como en otras ocasiones, serviría para felicitar las fiestas, entre vinos y canapés, tras un ejercicio en el que, después de años de bonanza, los nubarrones de la mayor crisis económica de la democracia se instalaban sobre España. Pero el presidente de la multinacional española, Antonio Brufau, tomó la palabra y aprovechó para descargar lo que venía rumiando desde hacía unos días.

«Cualquier cosa que suponga la pérdida de control de la compañía como consecuencia de una operación que no sea lanzar una OPA, no me va a tener a mí al frente», advirtió. Los accionistas, dijo, debían ayudar en lo posible a la compañía. «Si esto no fuese así, obviamente no habré luchado yo sesenta años para acabar con esta situación, no estaría yo dirigiendo una compañía que no hubiese pasado por la pura claridad de las reglas del mercado», subrayó.

Brufau se refería al intento de entrada de Lukoil en el capital de Repsol. La multinacional rusa mantenía conversaciones con accionistas relevantes del grupo español, Sacyr y Caixa, para comprar sus participaciones y tomar el control.

La posición del presidente de Repsol fue determinante para dejar claro que no iba a consentir una operación, ya tuviera apoyo político o no, que no respetara las reglas esenciales del mercado.

Según se publicó entonces, Lukoil pretendía comprar el 20% que tenía Sacyr en Repsol, y adquirir títulos de otros accionistas hasta alcanzar al menos el 30% del capital. Brufau advirtió que la toma del control de Repsol por un accionista obligaría a este a lanzar una OPA sobre el 100% del capital.

«No fue un paripé, Lukoil efectivamente mostró interés en entrar en Repsol», recuerdan antiguas fuentes de la compañía española consultadas por este diario. «El presidente fue claro, si alguien quería el control de Repsol tenía que lanzar una OPA, y si no, dejaría el cargo», comentan.

Otras fuentes de las empresas afectadas en aquella posible operación, dudan hoy sin embargo de los intereses reales de unos y otros. «Era una operación que manejaba Rivero (Luis del Rivero, ex presidente de Sacyr), a nivel personal, en Sacyr nadie estaba realmente al tanto, era algo que sólo conocía Rivero», señalan.

Y en esa operación de Lukoil sobre Repsol, un hombre que lo ha sido todo en el desarrollo de la industria del petróleo de Rusia de los últimos treinta años, Ravil Maganov, optaba a ocupar un asiento en el Consejo de Administración del grupo español. Este jueves, Maganov falleció tras caer por una ventana en el hospital de Moscú en el que se encontraba ingresado.

Las extrañas circunstancias de la muerte de Maganov se suman a las que rodean a las de otros grandes empresarios rusos que, desde el inicio de la invasión de Ucrania, han fallecido. El pasado mes de mayo un ex alto directivo de Lukoil, Alexander Subbotin, murió en casa de un chamán.

La petrolera rusa privada pidió el pasado mes de marzo poner fin «lo antes posible» a la «operación militar especial» ordenada por Putin sobre Ucrania el 24 de febrero. «Abogamos por un cese del conflicto armado lo antes posible y apoyamos totalmente una solución por medio de negociaciones y medios diplomáticos», afirmó Lukoil en un comunicado.

Ravil Maganov nació en la República Soviética de Tatarstán, en 1954, el hogar de los tártaros, la mayor minoría étnica de Rusia. Hijo de un ingeniero que trabajaba en un campo petrolero, se graduó a finales de los setenta en la Universidad Estatal de Moscú de Petróleo. En 1991 participó en la fundación de Lukoil, ocupando puestos ejecutivos en la compañía hasta que en 2020 fue nombrado presidente.

Lukoil lamentó este jueves en un comunicado el fallecimiento de su presidente, sin aludir a la caída por la ventana del hospital en el que estaba ingresado.

«Lamentamos profundamente anunciar que Ravil Maganov, presidente de la junta directiva de Lukoil, ha fallecido tras una grave enfermedad», informó la compañía rusa. Maganov «contribuyó inmensamente al desarrollo no sólo de la compañía, sino de todo el sector del petróleo y gas ruso», añadió. «Gracias a su talento», indicó, «Lukoil evolucionó de un pequeño grupo de producción de petróleo a una de las compañías energéticas líderes en el mundo en muy poco tiempo».

El presunto interés de Lukoil sobre Repsol no llegó a nada. El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, que no impidió la compra de la española Endesa por la italiana Enel, no veía con buenos ojos la operación. Aunque Lukoil era una empresa privada, a nadie se le escapaba entonces los riesgos que conllevaba dar entrada a un grupo ruso en una multinacional estratégica para la economía española. Se llegó a publicar que el Rey Juan Carlos intercedió a favor de la entrada de Lukoil en Repsol.

¿Cuál habría sido el destino de Maganov de haber entrado Lukoil en el capital de Repsol? ¿Qué sería ahora de Repsol, de España, de haberse producido aquella operación?

Lo último en Economía

Últimas noticias