Jeep da una lección a Sánchez: adelanta el dinero de las ayudas para eléctricos por los tiempos de espera
Las ayudas que ha puesto en marcha el Gobierno de Pedro Sánchez para incentivar la compra de coches eléctricos se han convertido en uno de los grandes fracasos de esta legislatura y un dolor de cabeza para los beneficiarios. Los solicitantes del denominado plan Moves III tienen que esperar una media de un año y medio para ver el dinero de las subvenciones en su cuenta del banco, pero en algunos casos este plazo se estira más allá de los dos años. Ante esta situación, fabricantes automovilísticos como Jeep han optado por buscar una solución al problema para evitar perder ventas de coches con estas motorizaciones y ofrecen a sus clientes el adelanto de la ayuda para que no tengan que sufrir los plazos del Ejecutivo.
Así lo han confirmado fuentes de la compañía, en conversaciones con este diario, que han señalado que «la compañía ha puesto en marcha un nuevo programa de renting flexible con el que los clientes no tendrán que esperar a que el Gobierno les pague las subvenciones para la compra de coches eléctricos, que acumulan un retraso medio de 18 meses, ya que nuestra financiera les adelantará el dinero que les corresponda el Plan Moves III dependiendo del modelo de la gama de Jeep por el que se decanten».
Una medida con la que la compañía de Stellantis prevé captar nuevos clientes, sobre todo aquellos que dudaban sí comprase un eléctrico o híbrido enchufable, por la entrega de la subvención de forma directa. No obstante, Jeep no es la única marca del grupo que dirige Carlos Tavares que ha adoptado esta medida: Peugeot también ha puesto en marcha esta fórmula bajo el nombre de Electric Renting disponible tanto para turismos como para vehículos comerciales a pilas.
En concreto, las subvenciones del Ejecutivo pueden llegar a descontar hasta 7.000 euros del precio total del vehículo en caso de achatarramiento, lo que deja a algunos eléctricos por debajo de los 20.000 euros, que es el coste medio en el mercado español de un coche propulsado por gasolina o diésel.
Fracaso del Moves III
Los largos plazos de espera evidencian la mala gestión de las ayudas para la compra de eléctricos que ha puesto en marcha el Gobierno de Pedro Sánchez. Desde su puesta en marcha en 2021, la patronal de los fabricantes de coches Anfac pidió al Ministerio de Transición Ecológica e Industria -carteras encargadas de la gestión de las inversiones- un cambio en el modelo para que los solicitantes del plan Moves III recibieran de forma directa las subvenciones con el objetivo de incentivar de forma real la comercialización de este tipo de vehículos.
Una petición de Anfac a la que el Gobierno de Pedro Sánchez ha hecho oídos sordos. El Ejecutivo no ha querido corregir los problemas pese a comprometerse a ello y aún no ha confirmado la prórroga de las ayudas a la compra de vehículos propulsados por motores eléctricos más allá de diciembre de 2023.