Economía

La inversión extranjera se desploma en 5.500 millones en plena parálisis política

La incertidumbre generada por la incapacidad de Pedro Sánchez de formar Gobierno ha provocado la salida de unos 5.500 millones de euros en apenas un año. Según los datos actualizados por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, la inversión productiva extranjera (descontadas las Entidades de Tenencia de Valores Extranjeros) cayó en el segundo trimestre un 81,9% interanual, hasta quedarse en 3.662 millones de euros brutos.

Además, si se descuentan las inversiones, el desplome de la inversión extranjera es aún mayor, hasta el punto de alcanzar una caída de casi el 92%, hasta los casi 1.500 millones de euros, frente a los casi 18.000 millones de euros del segundo trimestre de 2018.

Madrid, la gran atracción de capital

Según los datos elaborados por el Ministerio de Turismo, Madrid vuelve a ser la ciudad que más atrajo capital extranjero. Sólo en la capital, se lograron inyectar unos 2.700 millones de euros que, eso sí, supusieron un 86% menos que un año antes. En segundo lugar, aunque muy alejada, se encuentra Cataluña, con una inversión extranjera bruta de 530 millones de euros.

También destaca la caída de la inversión extrajera en el País Vasco, donde ha pasado de 327,8 a 17,5 millones. En sentido contrario, destaca el aumento de inversión exterior en Galicia, donde en el mismo periodo se ha duplicado de 41,3 a 100,4 millones. Asimismo ha crecido en la Comunidad Valenciana, de 83,2 a 128,5 millones y en Andalucía, de 94,9 a 104,2 millones.

Sorpasso de Madrid a Barcelona

El capital extranjero huye de Cataluña, y cada vez son más los informes que así lo reflejan. El último ha sido el European Attractiveness Survey 2019 de la consultora EY, que muestra cómo Barcelona ha pasado de ser la quinta capital europea más interesante para el capital foráneo a la novena, una caída que coincide con la llegada de Ada Colau al consistorio barcelonés y al auge del independentismo en la Generalitat.

En contraposición, Madrid ha ido escalando posiciones en lo que se refiere a la inversión extranjera, donde la capital ha escalado al séptimo lugar, mientras Barcelona ha caído al noveno. Un ‘sorpasso’ en toda regla que deja en muy mal lugar a una Cataluña cada vez más enroscada en el independentismo y, por ende, más afectada económicamente.

Por si esto fuera poco, el informe de EY revela cómo el 8% de los directivos encuestados por la consultora sitúan a la capital como una de las tres mejores ciudades del Viejo Continente para invertir, mientras que esa cuota baja al 6% en el caso de la Ciudad Condal.