`
Actualidad
Trabajo

Esto es lo que pasa si te pides una excedencia laboral para cuidar de tus hijos en verano: lo que nadie te cuenta

Toma nota de lo que pasa si pides una excedencia laboral para cuidar de los hijos en verano

El SEPE confirma el cambio más radical: la nueva norma del subsidio que te afecta seriamente

  • Gemma Meca
  • Licenciada en Historia, máster en Periodismo y Comunicación Digital. Redactora en Ok Diario. Cuento historias, soy amante de los astros, sigo a la luna, los TT de Twitter y las tendencias en moda. Experta en noticias de consumo, lifestyle, recetas y Lotería de Navidad.

Pedir una excedencia laboral para cuidar de los hijos en verano, es algo que cada vez se plantean más familias y no es casualidad. Estamos ante la era de la conciliación más y más complicada. Las edades en las que se tienen los hijos no hacen viables la opción abuelos o, simplemente, se vive en un lugar diferente de dónde está la familia o quizás son los propios abuelos los que apuestan por disfrutar de su vida.

En esencia, las familias se enfrentan solas al cuidado de unos hijos que implica una suma de dinero enorme a final de mes. Durante el año, los comedores escolares, los colegios y las extraescolares ya son caros, pero se pueden ir sobrellevando, con los dos sueldos. Lo peor, llega cuando nos enfrentamos a una situación que puede acabar siendo lo que marque estos días que tenemos por delante y que supone un plus de inversiones, fuera del horario escolar. Muchas familias optan por una excedencia para poder estar con los niños en estos días de verano en los que ellos tienen más de 2 meses sin clases.

Lo que nadie te cuenta

La realidad que cada vez más personas optan por una excedencia laboral para cuidar de sus hijos en verano, algo que puede sorprendernos más de lo que esperaríamos. Estamos ante un cambio de tendencia que se está afianzando por varios motivos.

La figura de la excedencia para cuidar a los niños se extiende. La conciliación entre la vida laboral y la familiar, puede llegar a ser especialmente complicada de poner en práctica. Nos enfrentamos a una novedad destacada que puede acabar siendo la que nos marcará de cerca, con algunas novedades que serán las que nos afectarán de lleno.

No es nada fácil hacer equilibrios entre la vida profesional y la personal, al final, todo se reduce a la cantidad de dinero que invertiremos en ofrecer a los hijos la mejor educación posible, pero también, tiempo de calidad en familia. Con más de 2 meses libres, toca pensar en cómo gestionar ese tiempo en el que la mayoría tendremos que trabajar.

Es decir, no se podrá mantener el equilibrio entre trabajo y familia que, con un horario y un orden, acabamos pensando en ese cambio que lograremos con un permiso que puede ser diferente a cómo nos lo imaginamos.

Si te pides una excedencia laboral para cuidar a tus hijos pasa esto

Cuidar a los hijos en vacaciones suponer dejar de trabajar y, por lo tanto, de cobrar. Se reserva el puesto de trabajo y se llega a un acuerdo con la empresa que debe garantizar el regreso de la persona en el momento que se terminen estas vacaciones o pueda contar con la ayuda necesaria.

Todo se reduce a los números adecuados. Estamos ante una situación que puede acabar convirtiéndose en la antesala de algo más, cuando en realidad tenemos que afrontar algunos cambios destacados que hasta el momento no esperaríamos que tengamos en mente.

Dependiendo del número de hijos siempre será mejor empezar a tener en consideración una excedencia que haga las cosas más sencillas. No es sólo cuestión de dinero, también de disfrutarlos o pasar más tiempo con ellos, aunque la parte económica pesa.

Los campamentos son caros, de la misma forma que cualquier actividad que quieran hacer en verano, nos costará una buena cantidad de dinero que debemos tener en consideración, antes que nada. Calculadora en mano y sabiendo que el mes de julio, dependiendo de la cantidad de euros que tendremos en mente podremos conseguir más o menos.

A veces sale más barato no trabajar que invertir todo el sueldo en gastos. Supone la tranquilidad de no tener que ir de un lado a otro, la posibilidad de estar con los niños y el hecho de que tengamos un poco más de descanso puede ser la excusa perfecta para dar el paso.

En general, son las mujeres las que se toman esta excedencia, pero cuidado, porque cada vez más hombres optan por disfrutarla. Hay muchas familias que deciden turnarse o, simplemente se quedan con el sueldo más elevado o el trabajo que sea más fácil de conseguir la excedencia.

Los funcionarios son los primeros en apostar por este sistema que les permite dejar su puesto durante estos meses, para volver al septiembre en el mismo momento que sus hijos vuelven al colegio. Una excedencia laboral que supone no cobrar, pero si disponer de un puesto de trabajo.

Algo que cada vez más personas valoran y optan por dejar de pagar a terceros para poder disfrutar un poco más del verano y hacerlo de la mejor manera posible, en familia y con unos niños que dejarán de serlo en algún momento.