Economía
Vinos

Este es el principal motivo por el que algunos vinos españoles han triplicado su precio

El vino es una de las bebidas alcohólicas más consumidas en todo el mundo, la que más junto a la cerveza, sobre todo en España, donde contamos además con algunos de los mejores vinos del mundo. Hoy te contamos por qué algunos vinos españoles han triplicado su precio en los últimos meses, ya que hay un motivo muy importante para que esto haya sucedido, aunque está claro que a los consumidores no les gusta esta subida.

Los vinos españoles tienen una gran valoración en todo el mundo, y es que sin duda España es uno de los países con una mayor producción, no sólo eso, también con excelente calidad en sus vinos, ya sean blancos, rosados, tintos o cualquier otro tipo. La producción vinícola española es, con todo merecimiento, un éxito, además de una apuesta segura cuando buscas una bebida especial para cualquier cena o comida, tanto si la organizas tú como si te han invitado.

El motivo por el que los vinos españoles triplican su precio

Son muchos los motivos que pueden llevar a un vino, o a cualquier otro producto, a subir de precio o a tenerlo ya alto de por sí, normalmente por su calidad o antigüedad, pero hay otro al que también se debe prestar atención y que tiene mucho que ver con la famosísima ley de la oferta y la demanda. Hay un tercer motivo que últimamente se está dando mucho, y es que hay vinos que se fabrican en menor cantidad, por lo que se convierten prácticamente en botellas de coleccionista, de ahí la subida.

En España hay muchas bodegas que apuestan por un modelo de pequeña producción, lo que hace que se conviertan en vinos exclusivos y su precio se multiplique al menos por 3, pero en algunos casos se llega a multiplicar por 20, lo que hace que sea prácticamente imposible su compra, al menos para un ciudadano medio que no tenga unos cuantos ceros a la derecha en su cuenta corriente.

Por poner algún ejemplo español, el Viña Tondonia blanco o rosado sale de bodega con un precio de 30 euros, pero en Estados Unidos se paga por él 300-400 euros ya que llegan pocas botellas y están muy bien valoradas, siendo uno de los vinos que más éxito está teniendo en ese país en los últimos tiempos. Sucede también con otros vinos españoles, que se han encarecido muchísimo en el mercado aunque siguen saliendo de bodegas al mismo precio.