Continental Sixperience: de vender neumáticos a la movilidad sostenible

Continental ha presentado a la prensa especializada su sexta generación de neumáticos de verano en el exquisito circuito de Ascari en Ronda. Para la ocasión no faltó nadie de la plana mayor que representa a la división española de la marca conocida por vender neumáticos, aunque su realidad de negocio a día de hoy es mucho más amplia y ha diversificado su actividad haciendo de la movilidad en general su principal bandera.

Bajo el epígrafe “Sixperience” Continental ha puesto de largo sus últimas creaciones, neumáticos de altas prestaciones con varias declinaciones para poder atender a vehículos de toda condición. Los más deportivos, denominados “SportContact 6” se pudieron probar en unas condiciones idílicas sobre el asfalto del circuito andaluz.

Con coches de entre los 300 y 400 caballos de potencia se pudo apreciar la adherencia, reforzada en su parte exterior con los característicos bloques de Continental; la rapidez de respuesta a las exigencias de los coches al inscribirlos en curva, una agilidad de la que es responsable la costilla central de estas gomas y su mejora en emisión de ruido (hasta 9 decibelios menos que la anterior generación).

Los más confortable “PremiumContact 6” ofrece neumáticos de altas prestaciones pero destinados a un uso más habitual. Se pudieron probar en circunstancias normales de rodadura, en carreteras de asfalto regular, en comarcales bacheadas e incluso en caminos de firme dudoso. El resultado llama la atención por su silencio de marcha, que es lo más apreciable cuando se utiliza el vehículo de forma cotidiana.

Este tipo de neumáticos puede acompañarse de varias opciones, como por ejemplo unas bandas interiores que refuerzan la emisión de ruidos para mitigarlos; y otro sistema de Continental que admite pinchazos de clavos en la banda de rodadura sin perdida alguna de presión de inflado.

Por último también se pudo probar la versión 6 de neumáticos específicos para coches de tipo SUV y todo terreno. Esta familia contempla varias opciones siendo la más campera una que reparte el uso de asfalto y campo en un 70% y 30% respectivamente, pero la que llamaba más la atención es la que es 100% carretera, pero destinada a este tipo de vehículo, es decir que puede usarse esporádicamente fuera de lo negro, el resultado de alguna de las pruebas con este tipo de goma fue espectacular dado que el grip o agarre en pendientes pronunciadísimas era increíble permitiendo al vehículo salir desde parado en plena cuesta.

En suma, el producto de sexta generación de Continental se adecua a los tiempos, a los coches cada vez más deportivos, pero también a las circunstancias actuales de tráfico. Los técnicos de la multinacional ya están trabajando en una séptima generación, como no podía ser de otra manera en una empresa que destina un 6,9% de sus ventas a I+D+I.

Un crecimiento imparable

La presentación de esta parte de la sexta generación de su familia de neumáticos fue también un excelente momento para volver a explicar cómo Continental ha desplegado una estrategia de producción de producto mucho más allá de los neumáticos: sin dejar de ser uno de sus cores de venta tan solo suponen un 26% de su facturación.

Continental ha pasado de ser una meticulosa fábrica de neumáticos, localizada en Alemania, país donde prácticamente vendía todo su producto, a una multinacional presente en 56 países en todos los continentes y con grandes inversiones para seguir creciendo.

Su ambición toca todas las áreas que rodean el automóvil. Si tenemos en cuenta la múltiple gama de elementos de un vehículo que toca Continental, desde los conocidos neumáticos hasta los sistemas de frenado de seguridad, pasando por partes de caucho del automóvil, el chasis y la seguridad, podemos afirmar que Continental está presente en casi la totalidad de las marcas y modelos que ruedan por las carreteras de todo el mundo.

Hasta llegar a esta situación, no hay más que ver la valiente estrategia de esta compañía a la hora de cómo han planteado su futuro. Las inversiones comprando distintas compañías han sido un ejemplo de cómo no quedarse encasillados en un segmento, el de los neumáticos, e invertir en todo lo que rodea la movilidad.

Hace ya tiempo que Continental dejó de ser el fabricante de neumáticos y se empezó a imaginar dónde debía estar cuando llegara el tiempo en el que los coches se conduzcan solos, cuando la tecnología haya llegado a su punto de encuentro perfecto con el ser humano. La máquina no dañará al hombre y tampoco permitirá el fallo humano. Esto explica el porqué Continental ha adquirido empresas como Motorola, VDO o una, puramente  de ingeniería, como Elektrobit con casi 2.000 ingenieros.

Crecimiento en facturación…. y en empleo

Las cifras de Continental son las de una multinacional con tintes de ser líder en varios segmentos, si en neumáticos es la tercera a nivel mundial tras Bridgestone y Michelin, en su conjunto Continental maneja una cifra de negocio multimillonaria, 40,5 billones “americanos” (40.500.000 millones). Para llegar a esta cifra la empresa ha mantenido un crecimiento medio anual de un 10% en los últimos años sin que la crisis mundial pareciera afectarle mucho y ha pasado de una plantilla de 72.000 personas en 2003 a las más de 220.000 que tiene hoy en día, crece a razón de 10.000 empleos al año.

Este devenir, además de hacer cada vez más lucrativo el valor de Continental en Bolsa, es también la base de ese intangible que las grandes empresas quieren siempre inventarse, un mundo mejor. Continental llama a esto VisionZero, un mundo creado para que haya cero accidentes, cero muertes alrededor del automóvil.cada presentación de producto, cada expresión de Continental de cara al público viene acompañada de su VisionZero.

Para la difusión de este anhelo, Continental ha elegido en España a un embajador muy especial, Emilio de Villota, una persona con una experiencia amplísima en el sector. Un experiencia de vida, la suya, entregada al máximo exponente del uso radical del automóvil como piloto. Transformada más adelante en otra faceta, la de creador de una escuela de pilotos que ha dado lo mejor del automovilismo nacional y mundial.

Una vida rubricada en este momento con esta embajada de Continental para representar al fabricante en el difícil mundo de la siniestralidad generada por el automóvil, algo de lo que Emilio sabe, desgraciadamente mucho, y que ahora, recogiendo el testigo de su hija María, difunde entre propios y extraños con una magistral forma de comunicar, pero sobre todo una incomparable calidad humana.