CaixaBank ganó 5.787 millones en 2024 y supera los objetivos del plan estratégico
La entidad asegura que ha cumplido sus objetivos de rentabilidad, eficiencia y morosidad
CaixaBank aumentó su beneficio neto un 20,2% en 2024 en comparación con el año anterior, hasta los 5.787 millones de euros, tal y como ha informado este jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). De esta forma, el banco catalán ha afirmado que, con estos resultados, ha superado «ampliamente todos los objetivos» financieros y cualitativos de su Plan Estratégico 2022-2024.
En concreto, la entidad asegura que ha cumplido sus objetivos de rentabilidad, eficiencia y morosidad, además de que fue capaz de crecer en cuotas de mercado en los principales negocios y promover la inclusión social y financiera.
Tras los resultados, el consejo de administración someterá a la aprobación de la junta general de accionistas la distribución de un dividendo con cargo a los resultados de 2.028 millones de euros, lo que equivale a 0,2864 euros por acción.
Este importe, sumado al dividendo a cuenta abonado en noviembre por un total de 1.068 millones de euros, eleva el payout al 53,5%. Además, el consejo ha dado luz verde a un nuevo programa de recompra de acciones, el sexto hasta la fecha, por un valor de 500 millones de euros.
Además, el consejero delegado, Gonzalo Gortázar, ha descrito 2024 como un año enormemente positivo y ha celebrado haber logrado los objetivos del Plan Estratégico en «crecimiento de la actividad comercial, mejora en la calidad de servicio, rigurosa gestión del riesgo y recuperación de una rentabilidad razonable».
«Nuestra fortaleza financiera nos ha permitido mantener una adecuada retribución a los accionistas en los últimos tres años, con un dividendo ordinario de 7.700 millones», ha declarado. Gortázar también ha destacado que se han distribuido 2.400 millones a la Fundación La Caixa y 1.300 millones al FROB durante este periodo de tiempo.
Resultados de CaixaBank en 2024
CaixaBank ha señalado que sus resultados de 2024 «muestran la fortaleza del negocio y el fuerte crecimiento de la actividad comercial», y que el volumen de negocio se consolidó por encima del billón de euros. Por otro lado, el banco catalán acumuló 280.000 clientes nuevos, hasta conseguir los 18,5 millones, de los que el 71,8% tiene tres o más familias de productos contratados.
Los recursos de clientes alcanzaron a finales de año los 685.365 millones de euros, tras registrar un aumento del 8,7% con respecto a diciembre de 2023. La entidad ha apuntado que los recursos en gestión patrimonial aumentaron «con fuerza», un 11,7% en el año, hasta situarse en 263.247 millones de euros, mientras que el resto de los recursos crecieron un 7%, hasta los 422.118 millones de euros, incluyendo un aumento del 6,4% en depósitos de clientes.
Las suscripciones netas de fondos de inversión, seguros de ahorro y planes de pensiones tuvieron «un elevado ritmo de crecimiento» y pasaron de 5.339 millones de euros a 11.414 millones de euros. La cartera de crédito sana de CaixaBank alcanzó los 351.511 millones de euros al cierre de diciembre, lo que supone un aumento del 2,2%. Este crecimiento contó con «una contribución positiva tanto de empresas como de particulares».
En cuanto a la nueva producción de crédito, todos los segmentos de particulares mostraron un «buen comportamiento», logrando un volumen total de 27.772 millones de euros, un 32% más. Dentro de esta categoría, la producción hipotecaria creció un 53%, alcanzando los 14.375 millones, mientras que el crédito al consumo subió un 13%, hasta 11.977 millones.
El margen de intereses se situó en 11.108 millones de euros, registrando un incremento del 9,8%. Sin embargo, en comparación con el trimestre anterior, experimentó una ligera caída del 1,9% debido al descenso de los tipos de interés.
Por otro lado, los ingresos por servicios, que incluyen gestión patrimonial, seguros de protección y comisiones bancarias, crecieron un 4,6%, alcanzando los 4.995 millones de euros.
El margen bruto registró un aumento interanual del 11,5%, situándose en 15.873 millones de euros. Este crecimiento fue superior al de los gastos de administración y amortización recurrentes, que subieron un 4,9%, hasta 6.108 millones. Esto permitió que el margen de explotación cerrara el año con un alza del 16,1%, alcanzando los 9.765 millones.
El banco también reportó mejoras en indicadores clave, logrando una rentabilidad sobre fondos propios (ROE) del 15,4% y una eficiencia del 38,5% al cierre del ejercicio.
Por último, CaixaBank ha destacado que la ratio de morosidad «se mantiene contenida y en niveles históricamente bajos» y que cuenta con una, textualmente, holgada posición de liquidez y una fuerte generación orgánica de capital.