Adiós al transporte público gratis a partir de este día: los afortunados que no van a pagar

A finales de diciembre de 2024, una serie de beneficios en el transporte público que han permitido a miles de personas disfrutar de abonos gratuitos o con descuentos de hasta un 60% llegarán a su fin. Estas ayudas, que se implementaron en 2022 para amortiguar los efectos de la crisis energética y la inflación, estaban destinadas a ofrecer una alternativa económica en momentos difíciles para muchos usuarios. No obstante, la situación está a punto de cambiar, ya que el 31 de diciembre será el  día en que los ciudadanos deberán decir adiós al transporte público gratis aunque todavía habrá unos afortunados que no van a tener que pagar.

El ministro de Transportes, Óscar Puente, confirmó en el Congreso de los Diputados que no se prorrogarán las ayudas de forma general, aunque indicó que se mantendrán ciertos beneficios para los sectores más vulnerables de la sociedad. La medida, que afecta a servicios de Renfe como Cercanías y Media Distancia, y a otros sistemas de transporte como el metro y autobuses de distintas ciudades, supone un ajuste importante en las políticas de movilidad. De esta forma, a partir de 2025, solo algunos grupos específicos de la población podrán beneficiarse de tarifas reducidas o gratuidad en los abonos.Conozcamos a continuación, el porqué del adiós al transporte público gratis y qué grupos sí que podrán seguir haciéndolo.

Adiós al transporte público gratis

Las ayudas al transporte público se implementaron como parte de un paquete de medidas extraordinarias para enfrentar las consecuencias económicas derivadas de la guerra en Ucrania y el alza de precios en el sector energético. En los últimos dos años, estas políticas han permitido que muchos usuarios frecuentes y trabajadores de zonas periurbanas accedieran a medios de transporte de forma gratuita o con descuentos significativos, ayudando a paliar la presión económica sobre las familias. Sin embargo, el 31 de diciembre será el último día para disfrutar de esta bonificaciones.

El Ministerio de Transportes y otros organismos públicos han evaluado el impacto de estas ayudas y han concluido que, a partir de 2025, se concentrará en colectivos que realmente dependan del transporte público y tengan menor capacidad adquisitiva.

Los grupos que seguirán teniendo descuentos y gratuidad

Con el cambio en las políticas de transporte, el gobierno ha anunciado que algunos sectores de la población continuarán recibiendo beneficios en sus tarifas de transporte. Entre los principales grupos destacan los colectivos vulnerables, como personas con menos recursos económicos, quienes podrán acceder a ciertos descuentos o incluso a abonos gratuitos, aunque aún se esperan detalles específicos para estos beneficios.

Además, el ministro Puente también ha señalado que los jóvenes y los usuarios frecuentes tendrán acceso a descuentos especiales en 2025. De este modo, se mantendrá una estructura de precios reducidos para aquellos que utilicen el transporte de forma regular, lo que busca fomentar el uso del transporte público sin cargar el coste completo a quienes dependen de él en su día a día. Aún así, queda pendiente la publicación de la normativa final y los requisitos específicos que se aplicarán para acceder a estas tarifas especiales.

Impacto de la retirada de las ayudas en los precios de los billetes

Para aquellos que no formen parte de los grupos beneficiarios, el coste del transporte público cambiará notablemente. Según las tarifas actuales que Renfe ha presentado, los precios para 2025 en servicios como Cercanías variarán dependiendo de las zonas y distancias. Por ejemplo, un billete sencillo para una o dos zonas costará 1,70 €, mientras que un abono mensual para las mismas zonas ascenderá a 28,90 €. Para distancias más largas, como siete zonas, el precio del billete sencillo alcanzará los 5,50 €, y el abono mensual costará 92,90 €. Estos cambios implican que muchos usuarios verán un aumento considerable en sus gastos de transporte, y por ende, en su presupuesto mensual.

Reacciones ante la medida y próximos pasos

La decisión de limitar los descuentos a ciertos colectivos ha generado reacciones variadas. Por un lado, organismos como el Comité Español de Personas con Discapacidad (CERMI) han solicitado que las personas con discapacidad oficialmente reconocidas también sean incluidas en estos beneficios. La petición subraya la importancia de un transporte accesible para todos y el apoyo necesario para quienes tienen dificultades de movilidad o necesidades específicas de transporte.

Por otro lado, algunos ciudadanos expresan preocupación sobre el impacto económico que esta medida tendrá en los hogares que se habían beneficiado de la gratuidad en el transporte. Sin embargo, se ha optado por apostar por la gratuidad y los descuentos para quienes realmente lo necesitan, asegurando que el transporte público siga siendo una opción accesible y sostenible.

En definitiva, el próximo año marca el final de una era de ayudas generales en el transporte público en España, una medida que ha sido vital para muchas personas. Aunque no todos los usuarios podrán mantener el beneficio de la gratuidad, sí lo harán aquellos que son más vulnerables. Con la expectativa de que se publique la normativa específica en los próximos meses, la población estará atenta a los detalles que definirán los nuevos precios y las condiciones de los descuentos para aquellos que seguirán siendo los «afortunados» en el transporte público de 2025.