En el vestuario de España nadie se fía de Rusia

• Hugo Carrasco @hugocarrasco92
• Redactor de deportes. Cubriendo a la selección española femenina y al Real Madrid femenino. En OKDIARIO desde 2017.
• • 26/06/2018 19:55
  • Actualizado: 26/06/2018 20:04

Con más suerte que fútbol, la selección española está en octavos de final como primera de grupo. Evita de esta forma medirse a Uruguay en octavos o, presumiblemente, a Francia, Alemania y Brasil hasta una hipotética final. Y es que el grupo que dirige Fernando Hierro confía en sus posibilidades en este Mundial 2018. Saben que son uno de los aspirantes a todo y que, aunque las sensaciones dejadas en esta primera fase no han sido las mejores, continúan siendo uno de los rivales a batir.

Eso sí, siempre con cautela. Si algo han aprendido en la fase de grupos es que no hay rival pequeño. Irán y Marruecos -a priori inferiores- han exigido a España lo inimaginable para doblegarles y en el siguiente enfrentamiento será aún más difícil. La Roja se enfrentara a una Rusia anfitriona que se ha mostrado muy fuerte en lo que llevamos de competición.

Los rusos, liderados por un sorprendente Cheryshev, se han convertido en una de las sorpresas de su Mundial. Las goleadas ante Arabia Saudí y Egipto les catapultaron hacia los octavos y, pese a la derrota contundente ante Uruguay, no bajarán los brazos. El vestuario español lo sabe: «Cuidado con Rusia, que juega en casa».

La Selección conoce los peligros del conjunto dirigido por Cherchesov, pues hace menos de nueve meses se enfrentaron a ellos en un amistoso que acabó con empate a tres. Además, vienen crecidos tras una gran primera fase. En los dos primeros encuentros marcaron ocho tantos, demostrando un gran potencial en ataque, que contrasta con los errores severos de los nuestros en defensa durante la primera fase.

La derrota ante Uruguay está más que justificada y parece no haber mermado demasiado las esperanzas de los soviéticos, pues presentaron ciertos cambios en el once y se vieron pasada la media hora de juego con uno menos, lo que les hizo dosificar aún más si cabe pensando en la siguiente ronda.

Optimismo

La Selección, a pesar de no fiarse de la anfitriona es optimista de cara a lo que queda de Mundial. Son cuatro partidos, en el mejor de los casos, los que les quedan para finalizar su estancia en Rusia y confían en completarlos con éxito. Saben del potencial que tienen y de la gran cantidad de recursos que disponen en la plantilla. Cuentan con el que quizás sea el mejor equipo de los 16 que quedarán en octavos y saben que mejorando los errores cometidos en los primeros tres partidos optarán a poner la segunda estrella sobre el escudo.

«Lo importante era pasar y lo hemos hecho como primeros», apuntan desde el vestuario. Aunque hacen autocrítica, tal y como señalaron tras el empate ante Marruecos Sergio Ramos o el propio Hierro: «La imagen no ha sido a mejor». En definitiva, el combinado nacional no se descarta como candidata a hacerse con el título, aunque respetan a sus rivales. Sobre todo, a una Rusia que tendrá a su afición de cara para tratar de llevarles a eliminar a la campeona de 2010.