Philipsen vuelve a encontrar su mojo en el Tour

Jasper Philipsen fue el más rápido en uno de los últimos sprints de la presente edición del Tour de Francia. El ciclista belga consiguió levantar los brazos en Pau, a los pies de los Pirineos, después de una etapa que tuvo mucha más batalla de lo que a priori decía su recorrido. El viento y una fuga inapropiada provocaron cortes y tensión entre los favoritos.

Finalmente, fue el resistente Philipsen el que venció en un sprint que fue accidentado con el vigente campeón belga –Arnaud de Lie– viéndose involucrado en una caída. El ciclista del Alpecin volvió a mojarle la oreja a un Wout van Aert que sumó su segundo puesto consecutivo en una llegada llana, mientras que Pascal Ackerman se conformó con la tercera plaza.

La etapa estuvo marcada por el abandono de Primoz Roglic antes del inicio de la carrera tras su dura caída en la última jornada. Juan Ayuso, otro de los favoritos al top-5, también se bajó de la bicicleta después de un inicio muy duro donde no pudo seguir el ritmo por culpa de haber dado positivo en Covid-19.

El ciclista catalán, uno de los principales apoyos de Tadej Pogacar, se bajó de la bicicleta. Quizá porque sabían lo que iba a pasar, el equipo UAE decidió montar un auténtico zafarrancho de combate desde el primer momento filtrando a Adam Yates en la escapada. El ciclista intentó reengancharse a la general filtrándose en la escapada y provocando que no hubiese un minuto de tranquilidad en el pelotón.

Tras casi 100 kilómetros de tira y afloja, con los favoritos incluso escapándose del pelotón por culpa de los abanicos, finalmente se llegó a un armisticio temporal. El pelotón recuperó la paz en los últimos 15 kilómetros llanos y organizaron una llegada final donde Philipsen ganó su segunda etapa del presente Tour de Francia.