Norris se lleva la pole más caótica de los últimos años y pone tierra de por medio con Verstappen
El británico buscará su doblete tras la victoria al sprint
La carrera iniciará a las 16:30 horas, poco tiempo para reparar los cinco accidentes de la sesión
Así te la hemos contado
Lando Norris firmó la pole más complicada del Mundial de Fórmula 1 en el Gran Premio de Brasil. El piloto británico saldrá primero en la carrera que se celebrará este mismo domingo, por delante George Russell y de la gran sorpresa, Yuki Tsunoda. Pero sobre todo partirá 16 posiciones más adelantado que su rival por el título, Max Verstappen (con penalización de cinco puestos por cambio de una unidad de motor), duodécimo por uno de los cinco accidentes que se produjeron en la clasificación del circuito de Interlagos.
Pasó por los pelos de la Q1, sufrió en la Q2 y reinó en la Q3. Norris logró una pole de mucho mérito en Sao Paulo tras una sesión caótica que le deja muy por encima de su oponente, Verstappen. El holandés deberá remontar como nunca tras ese contratiempo que le impidió un último intento en la segunda parte de la sesión por el accidente de Lance Stroll y la posterior bandera roja. El canadiense fue uno de los accidentados, además de los pilotos de Williams, de su compañero, Fernando Alonso, que saldrá noveno, y del otro español, Carlos Sainz, que partirá desde la decimocuarta posición.
El top 10 de la parrilla más loca del año lo cerraban Esteban Ocon, Liam Lawson, Charles Leclerc, Alex Albon (a la espera de ver si corre por su grave accidente), Oscar Piastri y los dos Aston Martin –Alonso y Stroll–. Le tocará meter los codos a pilotos de la zona alta como Checo Pérez, Sainz, Lewis Hamilton y Verstappen, mientras que Norris podrá doblar su triunfo al sprint. Todo esto bajo el diluvio que se espera para la hora de la carrera (16:30 horas).
Y finalmente se corrió en Brasil. A las 11:30 arrancaba una sesión que se atrasó 15 horas y el panorama era radicalmente distinto, ya que la carrera se iba a celebrar muy poco después (16:30 horas). Además, la F1 nos enseñaba por fin los neumáticos de lluvia extrema, esos que llevaban un buen tiempo en el armario al levantar de más ese famoso spray que no limitaba la vista de los pilotos.
Primero de cinco accidentes
La Q1 se detuvo con bandera roja, pero no por las condiciones climatológicas. Fue por un fuerte accidente de Franco Colapinto, que en su primera vez con lluvia subido a un monoplaza de F1 se dio un buen golpetazo en la curva 3 del que salió ileso, pero en el que destrozó la parte derecha de su Williams a pocas horas de tener que sacarlo a pista para la carrera.
El reloj fue bajando como una cascada y todo era impredecible, por lo que pilotos de la zona alta como Norris y Hamilton estaban en verdadero peligro de eliminación. El primero pasó por el canto de un duro, salvando no sólo esta sesión sino sus aspiraciones por el título. En cambio, el de Mercedes no logró un tiempo que le metiera en la Q2 y caía eliminado junto a Oliver Bearman, Colapinto, Nico Hülkenberg y Guanyu Zhou.
La lluvia amainó en la Q2, pero sólo Piastri dio el paso de salir con intermedios para la primera tanda. El australiano fue el más listo de la clase, la pista se secó, y todos le imitaron para el siguiente intento. El agua estaba dando un respiro en Interlagos, incluso llegó a detenerse, pero justo en ese momento fue cuando se produjo el segundo accidente de la jornada, este protagonizado por Sainz.
Los dos golpes se produjeron en el mismo lugar, en la controvertida curva 3 del Autódromo José Carlos Pace, donde nada más reanudarse la Q2, Stroll salió disparado hacia los muros. Así acabó el segundo asalto, que dejaba a Norris como mejor colocado y a un espectacular Alonso segundo. El asturiano pasaba a la Q3 y no Verstappen, ni Pérez (estos dos por la circunstancia de la tercera bandera roja por el accidente del canadiense que les impidió un último intento), ni Sainz. Tampoco lo hacían Valtteri Bottas y Pierre Gasly.
Alonso se estampa en su oportunidad y pole de Norris
Poco le duró la alegría al asturiano, que no marcó un buen tiempo en su primer intento de la Q3 y cuando estaba en su segunda vuelta lanzada sufrió un accidente, el cuarto del día, en la curva 11. Este fue el más aparatoso de todos, pero afortunadamente salió ileso. Eso sí, Aston Martin tendrá muchísimo trabajo de reparaciones para poder sacar sus dos monoplazas a la pista en tiempo récord.
Nada más reanudase por enésima vez, otro accidente, el más grave de todos, detuvo la sesión a 3:31 del final. La clasificación se estaba haciendo eterna, pero el fuerte golpe de Albon en la primera frenada obligó al personal de pista a limpiar todos los restos que dejó su Williams, un problemón para los de Grove no sólo en lo deportivo, pues Colapinto será su única baza en la carrera, sino especialmente en lo económico.
Todo esto con la incógnita de una última tanda en la que los Visa Cash App RB y Ocon con su Alpine podían dar la campanada. Fue Tsunoda la máxima sorpresa, pero Norris el gran vencedor, que buscará desde la primera línea de la parrilla arañar otra victoria más que le acerque definitivamente a Verstappen para luchar por su primer Mundial de F1.