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El Barça le quiere recortar más del 30% de la ficha

Jordi Alba prefiere irse a la Premier a bajarse el sueldo

La rebaja salarial que exige el FC Barcelona a Jordi Alba le hace plantearse su continuidad. El jugador estaría dispuesto a marcharse, preferiblemente a la Premier League, antes que acatar con las nuevas medidas de la directiva

Jordi Alba no quiere quedarse a toda costa en el FC Barcelona. Al menos, en las condiciones que le plantea el club. Después de ser rescatado por Ronald Koeman de la criba inicial que se hizo tras la debacle ante el Bayern, la directiva ha planteado que, para poder continuar vistiendo la elástica azulgrana, deberá rebajarse el sueldo más un 30%. Algo que no convencería al lateral izquierdo, teniendo en cuenta, además, la incertidumbre que rodea al proyecto deportivo y a la institución.

Uno de los primeros conjuntos que había mostrado su interés en los servicios de Jordi Alba, por si finalmente el club o él decidían no seguir, era el Atlético de Madrid. Sin embargo, las preferencias del carrilero zurdo no pasarían tanto por quedarse en la Liga, si finalmente se decanta por salir, sino por poner rumbo a Inglaterra.

La conversación mantenida con Koeman frenó, en primera instancia, su marcha. El nuevo entrenador le aclaró que sí que cuenta con él, aunque desde la directiva busquen un refuerzo para el carril que ocupa. Sin embargo, después de enterarse de las nuevas medidas que pretende tomar la cúpula con el vestuario, su futuro sigue sin estar del todo claro.

Bartomeu y el nuevo director deportivo, Ramón Planes, quieren revisar a la baja los contratos de los jugadores en lo económico. El objetivo del club es descargar masa salarial, más allá de la que liberen con las ventas. Por ello, escudados en el bajón de ingresos para la temporada que está por empezar, pretenden dar un nuevo tijeretazo a los sueldos, que afecta de lleno a varios de los pesos pesados de la plantilla. En el caso de Alba, sería superior al 30%.

La rebaja de los salarios, unida a las malas formas de la cúpula, la falta de claridad respecto al nuevo proyecto y, sobre todo, a la más que probable salida de Leo Messi, el vestuario ha terminado por explotar. La situación del club es insostenible, lo que provoca que aunque Koeman cuente con varias de las vacas sagradas, estas no tengan del todo clara su continuidad.