Beckham quiere llevarse a Iniesta a la MLS

A Josep María Bartomeu se le están atragantando las renovaciones de los pesos pesados del Barcelona. Además de la apalabrada renovación de Leo Messi, no anunciada de forma oficial, Andrés Iniesta continua esperando una oferta de pretensiones considerables –tanto en lo económico como en lo deportivo– del equipo azulgrana para prolongar su vinculación al club de su vida. Ante la pasividad de la dirección deportiva culé, varios son los candidatos que han llamado a la puerta de Iniesta, y el último no es otro que la nueva franquicia de la MLS que David Beckham fundará en Miami. 

El comisionado de la MLS, Don Garber, informó el pasado agosto de la autorización al grupo de inversión Miami Beckham United a finalizar los detalles y crear de forma oficial una nueva franquicia de expansión de la MLS, y uno de los promotores del proyecto, el ex madridista David Beckham, tiene a Iniesta como número uno entre los candidatos a adquirir la responsabilidad de ser el jugador franquicia. Entre los grandes atractivos de la nueva franquicia de Miami se encuentra un estadio en el que se invertirán 300 millones de euros, y un presupuesto amplio para convencer a jugadores de primer nivel mundial.

La Juventus sigue enredando en el futuro de Iniesta y se coloca como el gran rival de Barcelona y de la nueva franquicia de la MLS. Vista la pasividad de los culés a la hora de confirmar la renovación del manchego, el conjunto italiano quiere realizar la misma estrategia llevada a cabo en el verano de 2011, cuando se hicieron con los servicios de Andrea Pirlo después de que éste no fuera renovado por el Milan. El centrocampista italiano resucitó su carrera en el último tramo y gobernó el centro del campo de la Juve protegido por jugadores jóvenes que aportaban el físico.

La oferta de la Juventus y la de la MLS, sin embargo, podrían ser compatibles. El jugador, en caso de que el Barcelona no se ponga las pilas, saldrá gratis de la Ciudad Condal y ahí la Juventus le puede ofrecer un buen sueldo e importancia en un equipo candidato a la Champions League, en el que podría estar temporada y media hasta cruzar el charco y dar el salto a la MLS de la mano de David Beckham, que busca iniciar su andadura en el campeonato norteamericano en 2020.