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Esto es lo que le va a pasar a tu cuerpo si tomas piña todas las noches

Esto es lo que le va a pasar a tu cuerpo si tomas piña todas las noches
Janire Manzanas
  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

La piña, con su sabor dulce y refrescante, ofrece una serie de beneficios para la salud. Su contenido de bromelina proporciona propiedades antiinflamatorias y facilita la digestión, siendo útil para aquellos con enfermedades inflamatorias crónicas o problemas digestivos. Además, la piña es rica en vitaminas como la C y minerales como el manganeso, fortaleciendo el sistema inmunológico, mejorando la salud ósea y previniendo enfermedades crónicas.

El consumo regular de piña también puede contribuir a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas y diabetes debido a sus antioxidantes. Su bajo contenido calórico y alta fibra favorecen la sensación de saciedad, apoyando la pérdida de peso. Además, beneficia la salud ocular, la piel y el corazón, convirtiéndola en una fruta tropical valiosa para una dieta equilibrada.

Efectos de comer piña todas las noches

La piña, cuyo nombre en portugués, «Ananas», significa «fruta excelente», tiene sus raíces en Brasil y llegó a la Península Ibérica en el siglo XVI de la mano los conquistadores españoles que exploraban el Nuevo Mundo. Durante este periodo histórico, la piña también se incorporó a los cultivos en regiones como Hawai, Costa de Marfil y otros puntos de África. En la actualidad, la mitad de las piñas consumidas en Europa provienen de estos lugares.

El consumo de piña puede ser beneficioso para la pérdida de peso, independientemente del momento del día en que se consuma, siempre dentro de un plan adecuado con dieta y ejercicio. La piña aporta solo 42 calorías por rodaja y contiene bromelina, una enzima que, según un estudio, se asocia con beneficios metabólicos y puede contribuir a la pérdida de peso.

Además, la piña es rica en fibra dietética, que promueve la sensación de saciedad, y en manganeso, un mineral clave para reducir el riesgo de síndrome metabólico. Por otro lado, consumir piña por la noche puede mejorar la calidad del sueño, ya que contribuye a aumentar los niveles de melatonina, la hormona reguladora del ciclo sueño-vigilia.

En cuanto a la piel, la piña, con su alto contenido de agua y nutrientes como la vitamina C, betacarotenos y bromelina, puede nutrir e hidratar la piel, favoreciendo la producción de colágeno y contribuyendo al proceso de cicatrización. En general, la piña ofrece una serie de beneficios para la salud que van más allá de su delicioso sabor.

La piña también es conocida por mejorar la digestión gracias a la bromelina, que ayuda a descomponer las proteínas y estimula la producción de jugos gástricos. Además, su capacidad antioxidante, gracias a compuestos como flavonoides y compuestos fenólicos, ayuda a reducir el estrés oxidativo y sus efectos negativos en la salud.

Consumir piña con el estómago vacío es una práctica recomendada para maximizar sus beneficios. Ya sea en el desayuno o como «snack» por la tarde, la piña, con su enzima digestiva, puede ser especialmente beneficiosa cuando se consume después de las comidas, ayudando en el proceso digestivo.

Además, la piña contiene melatonina, una hormona que contribuye a regular el ritmo circadiano o ciclo de sueño. Consumir piña por la noche puede enviar señales al cuerpo de que es hora de dormir, facilitando un mejor descanso nocturno.

Fundación Española de Nutrición (FEN)

Considerada actualmente como el segundo cultivo tropical más extendido en el mundo, después del plátano, la piña ha alcanzado la categoría de superalimento debido a su destacado perfil nutricional. La Fundación Española de Nutrición (FEN) enfatiza la importancia de una maduración satisfactoria en la planta para obtener los nutrientes óptimos de la piña, convirtiéndola en una verdadera bomba nutritiva.

Con aproximadamente un 90% de contenido de agua, la piña no solo contribuye a la hidratación, sino que también favorece el tránsito intestinal. Además, aporta vitamina C e yodo, elementos esenciales para proteger las células contra el daño oxidativo y regular el funcionamiento metabólico, así como la función tiroidea.

Entre sus componentes destacan los ácidos orgánicos y la bromelina, una enzima con acción proteolítica que facilita la digestión de las proteínas en los alimentos y que también es responsable de la sensación de ligero picor en la lengua al consumirla.

¿Cómo consumirla?

La versatilidad de la piña en la cocina ofrece diversas opciones más allá de su disfrute natural. Puedes incorporarla de formas creativas, como en ensaladas que complementan tanto platos verdes como arroces, legumbres o con mariscos y gambas.

Asimismo, se ha vuelto común utilizar la piña en platos de carne, aportando un toque agridulce que destaca en recetas de pollo o cerdo, especialmente en la cocina asiática. Además, no hay que olvidar su presencia en pizzas, donde la combinación de sabores ha ganado popularidad.

Una opción original y atractiva, especialmente para los niños, es rellenar la piña con trozos de su pulpa mezclados con otras frutas, permitiéndote crear propio postre único. También, su jugosidad la convierte en un ingrediente perfecto para la elaboración de zumos, batidos y diversas bebidas refrescantes.

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