Las sorprendentes curiosidades sobre el centro de la Tierra

El núcleo de la Tierra es el centro muy caliente y muy denso de nuestro planeta. El núcleo en forma de bola se encuentra debajo de la corteza fría y quebradiza y el manto en su mayoría sólido. Estos son datos que puede que sepáis o que os explicaran en la escuela, pero lo cierto es que el centro de la Tierra tiene otros datos sorprendentes que además, resultan muy curiosos.

Curiosidades sobre el centro de la Tierra

Descubramos ahora juntos algunas de las curiosidades del centro de la Tierra que seguro os van a sorprender:

• En 1692 Edmond Halley (famoso por el cometa) propuso que la Tierra es hueca. Debajo de la corteza exterior donde vivimos, imaginó dos capas concéntricas y un núcleo del tamaño de Mercurio, todo flotando en un gas luminoso.
• Halley incluso imaginó que estas conchas podrían estar habitadas. Julio Verne se refirió a esta idea en su clásico Viaje al centro de la Tierra .
• Halley tenía razón sobre que el núcleo tiene el tamaño de un planeta, al menos. En el centro de la Tierra hay un orbe rico en hierro de más de 4,000 millas de ancho, más grande que Mercurio, en realidad, más cerca de nuestros pies que Los Ángeles de Nueva York.
• Su parte exterior está fundida. Su parte interior es un trozo sólido de metal que gira independientemente del resto del planeta.
• Las ondas sísmicas que atraviesan el centro de la tierra viajan más rápido de norte a sur que de este a oeste. Una teoría: el núcleo interno consiste en cristales metálicos alineados con los polos de la Tierra, y las ondas se mueven más rápidamente cuando van hacia estos.
• El núcleo interno es casi tan caliente como la superficie del sol, y la presión allí abajo es 3 millones de veces superior a la de la superficie.
• Los núcleos sólido y líquido de la Tierra juntos generan el campo magnético que evita que el viento solar, una corriente continua de 250 millas por segundo de partículas cargadas emitidas por el sol, destruya nuestra atmósfera.
• Se han descubierto bacterias en las cavidades y grietas de las minas de oro a 2,4 millas debajo de la superficie de la Tierra. Viven de hidrógeno y sulfatos, y su principal fuente de energía es la radiación, no el sol.
• El microbiólogo James Holden de la Universidad de Massachusetts en Amherst especula que la biomasa profunda de nuestro planeta podría pesar tanto como todas las cosas que viven aquí en la superficie.
• El cambio es inevitable, incluso en el núcleo. Al examinar los datos paleomagnéticos, los geocientíficos de la Universidad Johns Hopkins sugieren que las mitades oriental y occidental del núcleo de la Tierra se turnan para crecer y derretirse.
• El físico de Berkeley, Richard Muller, especula que el oxígeno, el silicio y el azufre están siendo expulsados ​​del núcleo interno y flotan hasta el límite entre el núcleo y el manto, donde se acumulan en dunas calientes y fangosas. De vez en cuando, una duna puede caer violentamente en el manto, acelerando la convección y perturbando el campo magnético.
• Reducir, reutilizar, reciclar. La lenta agitación de la tectónica de placas empuja la corteza hacia el interior, donde cualquier vida vegetal y animal queda atrapada y cocinada. El material orgánico finalmente resurge en forma de lava y gases volcánicos, incluido el dióxido de carbono que calienta la atmósfera.
• Este ciclo y el campo magnético protector generado por el núcleo mantienen a nuestro planeta a la temperatura perfecta para la vida.