200 garajes enfangados en Catarroja hacen peligrar la estructura de los edificios: «Pueden derrumbarse»
El pequeño municipio valenciano de Catarroja continúa luchando contra el fango y la suciedad 23 días después de que una riada arrasara sus calles. Ahora bien, el lodo sigue intacto en casi 200 garajes de la localidad impidiendo que los residentes puedan rescatar lo que queda de sus coches y causando además un riesgo evidente para la salud pública. A esto se suma el miedo que sienten los vecinos ante la posibilidad de que el barro y el agua que se encuentra en los aparcamientos puedan causar daños estructurales en los edificios. «Pueden derrumbarse», asegura una mujer residente en la calle Filiberto Rodrigo.
Tras los primeros días centrados en labores de búsqueda humanitarias y de emergencia han seguido los trabajos en alcantarillado, retirada de enseres y vehículos. Sin embargo, son tantos los garajes que continúan enfangados que la indignación de los pueblos es notable. «Aquí solo han entrado dos voluntarios que consiguieron poner luz», sentencia una vecina que se acerca al micrófono de OKDIARIO. Como ella, muchas más personas están indignadas ante la situación que tienen que seguir viviendo cuando ya se cumplen 23 días tras el paso la DANA que asoló parte de la Comunidad Valenciana. «Hemos hablado con los bomberos y nos han dicho que tienen una lista de garajes y van por orden, a ver si vienen pronto porque esta finca tiene más de 50 años y corre peligro», dice otra señora asustada mientras señala el lodo de al lado de su vehículo.
OKDIARIO ha sido testigo directo de cómo se encuentran estos garajes abandonados en los que todavía se encuentran multitud de coches destrozados, el lodo sigue como el primer día, muchas cañerías y bajantes generales de los edificios se han roto por lo que se suman los deshechos de los pisos, motos embarradas y un caos generalizado. En el municipio de Catarroja actualmente hay 557 garajes (afectados por la DANA) y aún hay 200 en situación crítica.
Esta circunstancia que afecta a Catarroja es un problema que comparten muchos de los municipios de la zona afectada por la DANA. «Casi tres semanas después, sigue sin darse una directriz clara y contundente para actuar en una preocupación de miles de vecinos afectados: la retirada de lodos acumulados en los sótanos, garajes y recintos subterráneos de sus fincas», lamenta la alcaldesa del municipio Lorena Silvent.
Por las calles principales de Catarroja la situación cambia. Hay zonas completamente despejadas y algún comercio ya está abriendo sus puertas. Sin embargo, la grave situación de suciedad y destrucción se está convirtiendo en un peligro para la salud pública y no deja a los vecinos poder rehacer sus vidas. La alcaldesa dice estar preocupada por la situación de Catarroja, una localidad que no es segura por sus niveles de toxicidad provocada por la concentración del polvo y las aguas sucias en las calles y garajes. Una situación de salubridad pública que, en poco tiempo, podría derivar en una epidemia según Silvent: «Parece mentira que no se lo estén tomando de manera seria, los voluntarios vienen a ayudar pero estar aquí es peligroso».