Cisma en el partido de Puigdemont: Sànchez quiere gobernar con ERC y Artadi nuevas elecciones
Quedan quince días exactos para que el Parlament de Cataluña se disuelva de forma automática si antes no se ha investido a Pere Aragonès como presidente de la Generalitat. En ERC lo tienen todo listo para la celebración de ese debate, discurso del candidato incluido, a la espera de que JxCAT les confirme si apoya la formación de un Gobierno en solitario presidido por Aragonès. La decisión deja al partido de Carles Puigdemont al borde de la ruptura interna.
Mientras el secretario general de la formación, Jordi Sànchez, es partidario de ceder cuatro votos a ERC para facilitar la investidura y continuar negociando su entrada en el Govern, Elsa Artadi descarta rotundamente esta posibilidad. Sánchez es el encargado de pilotar las negociaciones desde la prisión de Lledoners y Artadi, junto a Josep Pius, desde los despachos del Parlament. Con los principales líderes del partido presos o fugados, y la candidata Laura Borràs relegada como presidenta del Parlament, Elsa Artadi es ahora la mujer que lleva la voz cantante en Junts.
La opinión entre los dirigentes de la formación y las bases del partido también se divide entre los que deciden apoyar un Govern en solitario de Aragonès, para aprovechar la coyuntura favorable al separatismo, y los que prefieren forzar elecciones, tal como avanzó OKDIARIO hace unas semanas, conscientes que pueden quedar por delante de los republicanos al lograr los votos del PDeCAT, que no consiguió representación parlamentaria.
La pérdida de más de 250 cargos públicos que el formar o no formar parte del Govern supone para Junts es lo que provoca esa división. Algunos opinan que si ahora facilitan la elección de Aragonès, ERC subirá después el precio de su entrada en el Ejecutivo y podrían perder todos esos cuadros. La gran mayoría de ellos, pese a tener poca experiencia en el sector privado, se buscarían la vida a través de las puertas giratorias y dejarían al partido en una situación muy comprometida. La repetición electoral, sin embargo, alargaría unas meses más la situación en funciones de estos cargos y posteriormente podrían mantenerse si consiguen superar a ERC.
Artadi, que en caso de repetición electoral podría encabezar la candidatura, ya que Puigdemont -tal como explicó este lunes OKDIARIO- no quiere que lo vuelva a hacer la imputada Laura Borràs, pese a haber ganado las primarias, ya se ve presidenta de la Generalitat. Su nombre ha sonado en distintas ocasiones, pero ahora está más cerca que nunca. En caso de pacto con ERC tenía reservada la vicepresidencia y la consejería de Economía.
Con Borràs presidiendo el Parlament, lo que haría raro poner de cabeza de cartel a la presidenta del legislativo, la actual concejal del ayuntamiento de Barcelona es la mejor situada para liderar el proyecto. La economista se siente segura en el Consistorio barcelonés y, junto a otros colaboradores más renovadores, creen que si logran doblegar a Jordi Sànchez podrían desprenderse del secretario general preso, muy cercano a la vieja convergencia y a Artur Mas.
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