Armengol ignora al Instituto Balear de la Vivienda y creará otro chiringuito: la empresa pública de suelo
Tras disparar el precio de la vivienda, desbocará el de unos solares con el metro cuadrado ya más caro de España
Constructores y promotores de Baleares estallan contra Armengol por la escasez de vivienda asequible
Las políticas restrictivas de Armengol disparan al máximo histórico el precio de la vivienda en Baleares
La presidenta del Govern balear, Francina Armengol, ignora y puentea al Instituto Balear de la Vivienda (Ibavi), y creará otro chiringuito público más dentro de la administración autonómica: la empresa pública de suelo. Todo ello si en las próximas elecciones del 28 de mayo, reedita por tercera vez consecutiva su coalición de gobierno con independentistas de Més y Podemos.
Después de expulsar a los residentes del mercado de compra venta inmobiliario tras disparar los precios hasta situar a Baleares como la comunidad con la vivienda más cara de España, la presidenta Armengol, desbocará ahora aún más su coste, con este nuevo ente público.
Un organismo, que con el dinero de todos los contribuyentes, entrará en un exclusivo mercado de suelo como el balear, con el metro cuadrado más alto de todo el Estado (341 euros), para adquirir solares a precio de oro con el fin de construir vivienda protegida oficial (VPO).
Una labor que podría haber hecho durante estas dos legislaturas el Ibavi y que no ha realizado un instituto público autonómico, que no sólo no ha construido ni la tercera parte de la vivienda social prometida, sino que la que ha edificado ha sido a un precio de edificación desorbitado, y en suelos cedidos por los ayuntamientos.
Ahora a falta de 25 días para las elecciones, la alumna aventajada en Baleares del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se saca de la chistera otra empresa pública más que, en teoría, asumiría las competencias del Ibavi.
Su creación vendría acompañada de una inversión de 250 millones de euros para la compra de terrenos para ponerlos a disposición de la administración y construir vivienda protegida «en diferentes fórmulas», afirmó Armengol aunque sin precisar nada sobre lo que, todo apunta, que es un anuncio puramente electoralista.
La nueva empresa pública contará, como es habitual en estos casos, con una amplia representación política, ya que estarán representados los cuatro consells insulares para «disponer de suelo, agilizar la tramitación dedicada a las promociones públicas y también privadas, establecidas en la Ley de Vivienda estatal», indicó Armengol.
Por otro lado, los candidatos a los consells insulares también han desgranado otras de las medidas que pondrán en marcha en caso de llegar a las diferentes instituciones de las Islas.
En el caso de Ibiza, el conseller de Vivienda, Josep Marí, ha explicado que al menos el 15% de las futuras viviendas edificadas, irán destinadas a personas jóvenes para que «tengan más oportunidades de emanciparse».
Además, el aún conseller ha apuntado que el Consell luchará contra el «alquiler turístico ilegal, y en el caso de Menorca, la presidente y candidata Susana Mora, ha indicado que, con las iniciativas anunciadas, los socialistas «tratan de abordar el reto de ofrecer vivienda asequible para toda la gente de Baleares».
Algo que después de ocho años gobernando y con los precios del mercado en la mano, es evidente que no ha logrado el actual Govern en lo que es, sin duda alguna, el mayor fracaso de Armengol en estas dos legislaturas, por el impacto social y habitacional que ha supuesto para toda la población de Baleares en toda y cada una de las Islas.