Polémica en Aragón por ‘Los 6 de Zaragoza’ que entran en prisión: quiénes son y por qué se les condena

• Paula Ciordia @paulaciordia
• Zaragoza
• Periodista y filóloga. Corresponsal en Aragón.
• • 16/04/2024 17:11
  • Actualizado: 16/04/2024 17:12

La izquierda anticapitalista ha encontrado en ‘Los 6 de Zaragoza’ otra bandera más para escenificar el estado represor y policial en el que supuestamente vivimos, pero ahora con un adjetivo añadido, puesto de moda gracias a la Ley de Amnistía, el lawfare. Es decir, lo que se conoce como la instrumentalización de la Justicia con fines políticos.

Una acusación, la del lawfare, que protagonizó el diputado de Sumar por Aragón, Jorge Pueyo, este pasado lunes, tras la noticia de la entrada en prisión de varios de los condenados y por la que piden que se les conceda el indulto, al considerar que la Policía Nacional «detuvo a los chavales horas después y arbitrariamente», «basándose únicamente en la estética de éstos». Un indulto que también ha manifestado que concedería el comunista y diputado por Sumar, Enrique Santiago, en el programa de radio Carne Cruda.

Así se les conoce a los seis detenidos por desórdenes públicos, atentado y lesiones a policías, y que la extrema izquierda presenta como verdaderos mártires, por el proceso judicial de cinco años «en el que se les ha destrozado la infancia y la temprana juventud», en palabras del diputado aragonés de Sumar.

Una perspectiva muy diferente si se compara la versión de quienes realmente fueron las víctimas, además de los policías, y que fue Vox, a quien se le tachó de «fascista», motivo por el cual la extrema izquierda anticapitalista legitimó la violencia de sus actos por «manifestarse ante la extrema derecha».

El vicepresidente de Aragón, Alejandro Nolasco (Vox), ha celebrado la entrada en prisión de los condenados, considerándolo «una gran noticia» para la democracia, así como ha advertido que de concederse el indulto que reclama para ellos la izquierda, como Sumar, sería «extremadamente grave».

Los 6 de Zaragoza

Como decimos, se trata de cuatro jóvenes de edades comprendidas entre los 25 y 31 años de edad actualmente, así como dos menores de edad, los cuales fueron condenados a un año de libertad vigilada y al pago de una multa de 18.000 euros.

A los cuatro jóvenes mayores de edad, el Tribunal Supremo condenó este febrero a 4 años y 9 meses de prisión, por delitos agravados de desórdenes públicos y atentado, así como de lesiones a varios policías.

¿Qué pasó?

Nos tenemos que remontar al día 17 de enero de 2019, cuando se convocó una concentración «antifascista», con el lema «Contra el acto fascista de Vox», como contra manifestación a un acto legal de Vox. Se trataba de un mitin celebrado en el Auditorio de Zaragoza, en el que se estableció un amplio dispositivo policial de seguridad en previsión de las posibles alteraciones del orden público, por motivo de dicha concentración de extrema izquierda convocada a las 19:00 horas, en las inmediaciones del Parque Grande.

Dicha concentración terminó en una auténtica batalla campal de decenas de jóvenes que arremetieron contra la policía, lanzando piedras y adoquines, contra viandantes, agentes, y vehículos, así como la quema de tres contenedores. La policía pudo identificar a seis de los jóvenes que participaron en este hecho violento y vandálico, y de ahí que sean conocidos como «Los 6 de Zaragoza».

¿Qué dice la sentencia del TS?

Tal y como relata la sentencia del TS, «sobre las 18,45 h. un grupo de unas doscientas personas entre los que se encontraban los cuatro acusados (…)  se concentraron en el Parque Grande y bajo el grito de… ‘Vamos a llegar hasta el Auditorio…’, se encararon a los agentes desplegados saliendo del Parque e invadiendo la calle Fernando el Católico provocando con ello el corte de la circulación de vehículos y del tranvía. Con el fin de impedir que los manifestantes accedieran al Auditorio, fueron canalizados por una barrera policial hacia la Plaza de San Francisco donde el grupo profirió frases dirigidas a los agentes del orden tales como…’perros del Estado’ y ‘asesinos a sueldo’, a la vez que les propinaban patadas, puñetazos y empujones, agrediendo Imad M.B. al agente nº 116.753».

Seguidamente, según los hechos probados, «los manifestantes accedieron al interior del campus universitario, saliendo del mismo por la calle Domingo Miral, un grupo aproximado de unas ochenta personas, que comenzaron a lanzar indiscriminadamente piedras y adoquines, que arrancaban del suelo, contra las fuerzas del orden».

Tal y como explica la sentencia, «en cuya actividad participaron los cuatro acusados, alcanzando igualmente a vehículos estacionados en la zona y procediéndose igualmente a la quema de tres contenedores pertenecientes a la empresa FCC Servicios Ciudadanos. Seguidamente, dicho grupo se desplazó hacia la calle Pedro Cerbuna, donde cuarenta de los manifestantes entre los que se hallaban lo acusados, parapetados tras una barricada, continuaron lanzando piedras y adoquines contra agentes, viandantes y vehículos, lo que hizo preciso la utilización por parte de las fuerzas del orden de material antidisturbios».