Un joven marroquí con orden de expulsión agrede a una mujer que lo sorprendió robando en su furgoneta

La Policía Nacional ha detenido en Granada a un inmigrante de 21 años y nacionalidad marroquí tras agredir a una mujer que lo sorprendió robando en el interior de su furgoneta. La autoridad judicial ha dispuesto el ingreso en prisión del joven, que cuenta con antecedentes policiales, entre otros por hechos de la misma naturaleza. El arrestado se encontraba en situación irregular en territorio nacional por tener decretada su expulsión del país durante cinco años.

La investigación se inició tras recibir una denuncia en la que la propietaria de una furgoneta manifestaba haber sido «agredida por un varón al que sorprendió robando en la misma». En torno a la medianoche, la mujer había pasado por el lugar donde la estacionó previamente cuando observó que «la maneta de la puerta lateral estaba partida y descubrió a un varón dentro», según informa la Policía Nacional en una nota de prensa.

En ese momento se inició un forcejeo entre ambos. El joven marroquí habría intentado huir del lugar, pero la mujer se lo impedía. Como consecuencia del mismo, la víctima «recibió golpes y patadas que le provocaron varias lesiones de carácter leve». Finalmente, el individuo logró huir «llevándose un altavoz que terminó perdiendo durante la carrera y que pudo recuperar ella misma», tal y como ha detallado la Policía.

Robo a Cáritas en Cádiz

En otro orden de cosas, la Guardia Civil de Cádiz ha detenido en tres horas a tres personas, y está investigando a una cuarta, como presuntos responsables de un robo a Cáritas en el interior de la parroquia de Arcos de la Frontera (Cádiz). El robo fue denunciado a las 8:00 horas del sábado y esclarecido a las 11:00 horas del mismo día.

Entre los efectos sustraídos figuraban alimentos de primera necesidad que iban a ser entregados a una treintena de familias necesitadas de la localidad. Los tres detenidos, vecinos de Arcos y pertenecientes al conocido clan de ‘Los Palmeros’, han sido puestos a disposición del juzgado de guardia del citado municipio, cuyo titular ha autorizado la devolución de los efectos recuperados a la entidad.

La Guardia Civil ha explicado que el robo se produjo durante la madrugada del sábado y fue descubierto y denunciado por el párroco esa misma mañana. Tras realizar la inspección ocular en el lugar de los hechos, los agentes se percataron de que el modus operandi era similar al utilizado por un conocido clan de la localidad dedicado a robos en interiores de viviendas habitadas para cambiar lo sustraído por droga.

Tras recabar distintos indicios, se sometió a una vigilancia discreta a los investigados, viéndose recompensados sus esfuerzos a los pocos minutos, cuando los guardias civiles descubrieron a uno de lo detenidos portando algunos de los efectos sustraídos para venderlos o cambiarlos por dosis de estupefacientes. De forma inmediata, se procedió a su interceptación, comprobando que, efectivamente, se trataba de género sustraído en el robo.

La Guardia Civil ha manifestado que la experiencia de los agentes actuantes determinó la recuperación íntegra de los efectos sustraídos y el traslado a dependencias policiales para la consecución de diligencias y puesta a disposición judicial de todos los implicados en el robo, que terminaron reconociendo su participación en los hechos.