Herido muy grave un preso «extremadamente peligroso» tras provocar un incendio en la cárcel de Huelva
Un preso del centro penitenciario de Huelva ha resultado herido de gravedad tras provocar un incendio en su celda de aislamiento. El reo, catalogado de extrema peligrosidad, prendió fuego al colchón y la ropa que tenía a su disposición. Pese a la rápida actuación de los funcionarios de prisiones, fue rescatado en «estado de salud crítico».
Los hechos se remontan al pasado sábado 30 de abril. El citado recluso se encuentra clasificado en el artículo 91.3 del Reglamento Penitenciario -que refiere a presos «extremadamente peligrosos que participan en alteraciones regimentales muy graves que ponen en peligro la vida o integridad de funcionarios u otros internos»-, tal y como recoge el sindicato Acaip en un comunicado difundido este lunes.
Al saltar la alarma contraincendios, los funcionarios del área de vigilancia actuaron de manera «impecable, rápida y profesional, poniendo en riesgo su propia integridad física a pesar de usar los equipos de respiración autónoma y todos los medios de extinción disponibles para sofocar el fuego» originado en la cárcel onubense.
Así, consiguieron extinguir el incendio y sacar al interno de su celda, pero «en tal estado de salud crítica por la inhalación de humo y las quemaduras sufridas que apenas tenía constantes vitales», siendo trasladado con «toda urgencia» para su atención por los servicios sanitarios del centro penitenciario, que lograron salvar su vida.
Ya una vez estabilizado se solicitó la atención del 061, que lo trasladó en estado «muy grave» al hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva bajo la vigilancia de la Policía Nacional. Posteriormente, de madrugada fue devuelto al centro penitenciario, quedando «bajo la supervisión de los servicios médicos al faltar plazas para ubicarlo de nuevo en aislamiento», según Acaip.
Dicha organización ha señalado que el incendio provocado generó tal cantidad de humo que fue necesario «desalojar en tiempo récord y con el máximo de seguridad» a los cuatro internos, también clasificados como «extremadamente peligrosos», que se encontraban en la misma galería para evitar la intoxicación por la inhalación de humo.
Advertencia de Acaip
Desde Acaip han aprovechado la ocasión para advertir de que «en los últimos años se ha convertido en habitual la extinción y salvamento de internos en varios incendios intencionados», la mayoría de ellos en el módulo de aislamiento, donde se ubican los internos «más peligrosos del centro penitenciario, que son incapaces de vivir en régimen ordinario en los módulos comunes y han de vivir en la cárcel de la cárcel con las máximas medidas de seguridad de todo el centro».
Acaip alerta de que los funcionarios de prisiones «apenas» cuentan «con formación para la extinción de incendios», y «desde la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias se olvidan de dar una formación universal y anual en materia contraincendios», por lo que considera que «es obvio que es necesario que toda la plantilla del centro penitenciario de Huelva sea formada en esta materia de forma constante».
En esa línea, Acaip subraya que «los funcionarios de prisiones no somos bomberos, y nos estamos enfrentando a situaciones en las que, literalmente, nos estamos jugando la vida», por lo que la administración penitenciaria «debe aportar soluciones más eficaces» para «reducir este tipo de incidentes» y no exponer de esta manera «la vida de trabajadores».
Además, Acaip advierte del «incremento de personas que ingresan en prisión con graves problemas psiquiátricos», de forma que «prácticamente el 30% de la población reclusa tiene problemas mentales», si bien «la administración penitenciaria no reduce el déficit de facultativos en todos los centros penitenciarios y, en concreto, en el centro penitenciario de Huelva, donde después de estos años siguen sin realizarse consultas médicas por la falta de facultativos», de modo que «no se puede hacer un seguimiento adecuado del estado sanitario de la población reclusa, ni mucho menos de internos con estas graves patologías».
«Si hubiera en seguimiento médico en condiciones se reduciría el riesgo de que se produjeran este tipo de situaciones», continúan desde Acaip Huelva, desde donde, finalmente, han querido «ensalzar la encomiable labor que realizan los funcionarios de prisiones», en particular los del centro onubense, «para salvaguardar la vida de los internos que están bajo nuestra tutela».