Andalucía
Universidad de Sevilla

Dos youtubers investigados tras boicotear varias clases de la Universidad de Sevilla con una batidora

La Universidad de Sevilla (US) y la Policía investigan la gamberrada de dos youtubers que el pasado miércoles boicotearon varias clases de distintas facultades usando una batidora, imágenes que colgaron posteriormente en las redes sociales.

Los jóvenes, que según la US no son estudiantes universitarios, se habrían colado en al menos tres aulas para llevar a cabo sus fechorías. En el vídeo publicado se observa cómo sacan plátanos, leche y manzanas, trocean la fruta en una tabla y enchufan el pequeño electrodoméstico, que interrumpe la explicación de la profesora. «O te vas fuera del aula o llamo a conserjería a que vengan a echarte», les advierte la docente.

Los youtubers intentan repetir la broma en la misma facultad, durante una clase de Administración y dirección de empresas. En esta ocasión, la maestra no se percata de la situación y atribuye el ruido de la batidora a unas obras en el exterior. Son los propios jóvenes los que llaman su atención: «Disculpa, ¿tienes azúcar?». Pese a que la profesora les increpa su actitud, los chicos continúan con su broma y acaban bebiéndose el batido durante la clase.

En un tercer intento, en esta ocasión en la facultad de Derecho, los youtubers intercambian palabras con el profesor hasta que éste zanja la gracieta: «Le ruego por favor que abandone la clase. Si usted no se va me voy a ir yo».

La US denuncia hechos «execrables»

Ante estos hechos, la US ha emitido un comunicado este martes para anunciar una investigación y expresar su «máximo rechazo» a las «actuaciones inadecuadas» que se han registrado en el Campus de Ramón y Cajal y que han derivado en la apertura de «diligencias internas» para esclarecer lo ocurrido.

La US ha «contactado con las fuerzas del orden y seguridad del Estado para trabajar conjuntamente con este fin», señalan, recalcando que no tienen constancia de que los jóvenes sean estudiantes de la Universidad de Sevilla.

La Universidad ha manifestado que lo ocurrido «atenta contra el respeto y las formas universitarias» y «demuestra la carencia de los mínimos exigibles de educación y formación cívica de los individuos participantes».

En su nota, la institución académica ha remarcado su «apoyo y respeto al personal docente y al estudiantado que ha sufrido los inconvenientes», y reclama también «la mayor colaboración para la identificación y erradicación de tan execrables conductas».

Por último, la US ha expresado su «satisfacción» por la «respuesta académica, institucional y serena» llevada a cabo por el personal docente. Igualmente, ha recordado que los servicios de seguridad y vigilancia de la Universidad «estarán a disposición de la comunidad universitaria (…) para instar a abandonar los espacios docentes a quienes fueran merecedores de ello por su conducta inapropiada».