Andalucía
Sucesos Málaga

Dos magrebíes detenidos por asfixiar hasta la muerte a un cura en Málaga a comienzos de año

Emplearon "una gran violencia" ante la resistencia de la víctima, comprimiendo sus vías respiratorias hasta asfixiarlo

Ambos se encuentran en prisión provisional por estos hechos

La Policía Nacional ha detenido en Sevilla a un ciudadano francés de origen magrebí de 40 años, presunto autor material del asesinato de un cura estadounidense de 80 años, cuyo cadáver fue hallado el pasado 21 de enero en un apartamento vacacional del centro de Málaga. Este arresto, llevado a cabo el martes 25 de marzo, es el segundo relacionado con el crimen, tras la detención previa de un ciudadano magrebí de 27 años, considerado cómplice, el pasado 31 de enero. Ambos se encuentran en prisión provisional por estos hechos.

Según la investigación, los agresores —el francés y el magrebí— habrían seguido al religioso, quien había llegado a Málaga de vacaciones. Tras bajarse de un taxi, la víctima fue rastreada hasta su alojamiento. El ciudadano francés, presunto ejecutor del crimen, lo abordó sorpresivamente al entrar en el apartamento, mientras el magrebí actuaba como vigilante, dando cobertura a su cómplice. Las pesquisas del Grupo de Homicidios de la Comisaría de Málaga, junto a la Policía Científica, revelan que el cura fue seleccionado como un objetivo «vulnerable» debido a su edad y condición.

El cuerpo sin vida del sacerdote fue descubierto el 21 de enero, aunque la autopsia determinó que la muerte ocurrió el día anterior, por «asfixia mecánica por sofocación». Según los agentes, el agresor francés empleó «una gran violencia» ante la resistencia de la víctima, comprimiendo sus vías respiratorias hasta asfixiarlo. Tras el crimen, ambos sospechosos huyeron con las pertenencias del octogenario, incluida su maleta.

La investigación, que incluyó el análisis de imágenes de unas 80 cámaras de seguridad de comercios y del Ayuntamiento de Málaga, permitió identificar y detener primero al cómplice magrebí. Posteriormente, las pesquisas condujeron al ciudadano francés, sobre quien pesaba una Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) emitida por el Juzgado de Instrucción número 2 de Málaga. Su captura en Sevilla pone fin a una intensa búsqueda, ante el riesgo de que intentara fugarse. Los detenidos, con antecedentes por delitos contra el patrimonio, enfrentan ahora cargos relacionados con este brutal asesinato que ha conmocionado a la ciudad.