Agreden sin mediar palabra y dejan inconsciente a un párroco de Málaga: la Policía busca al agresor

Salvador Gil, párroco de la iglesia de la Amargura en Málaga, permanece hospitalizado en el Hospital Regional de Málaga tras sufrir una brutal agresión la noche del pasado lunes en la plaza de San Juan de la Cruz. El sacerdote, muy querido y carismático en la comunidad, fue atacado por un individuo que, sin mediar palabra, le propinó un puñetazo que lo dejó inconsciente en el suelo. Los hechos ocurrieron pasadas las 23:00 horas, cuando regresaba a casa tras cenar y asistir a una conferencia.

Según fuentes cercanas al párroco, «Salva se encuentra bien, algo dolorido. Le harán un TAC de control esta tarde y se quedará ingresado unos días. Rezamos para que se recupere pronto». Gil permanece en la unidad de Observación del hospital, a la espera de los resultados de las pruebas médicas que evalúen la evolución de sus heridas. La noticia ha conmocionado a la comunidad eclesiástica y a los feligreses de Málaga, que han mostrado su apoyo al sacerdote.

El incidente fue denunciado por dos sacerdotes que solicitaron la intervención de la Policía Local. Según relataron a los agentes, un hombre se les acercó y golpeó a Gil en la cabeza. Los efectivos municipales acudieron al lugar, realizaron batidas por la zona para localizar al agresor, pero no lograron dar con él. Posteriormente, elaboraron un parte de intervención que fue trasladado a la Policía Nacional, cuerpo que ha asumido la investigación del caso. Hasta el momento, no se han producido detenciones.

Salvador Gil, natural de Ronda y nacido en 1975, es una figura destacada en la Diócesis de Málaga. Ordenado sacerdote en 2001 por el obispo Antonio Dorado Soto, tras ingresar en el Seminario Diocesano en 1993, ha tenido una trayectoria notable. Su primer destino fue como párroco de Santiago el Mayor en El Morche, donde también impartió clases de Religión. En 2008, amplió sus estudios en el Vaticano, obteniendo un Doctorado en Teología Dogmática por la Universidad Pontificia Gregoriana de Roma en 2012. Desde el 6 de noviembre de 2016, ejerce como párroco de la Amargura y es director espiritual de la hermandad de Zamarrilla, cuya ermita pertenece a su feligresía.

Además, Gil es profesor en el Centro Superior de Estudios Teológicos y en la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Málaga, así como Patrono de la Fundación Victoria. Ha sido delegado diocesano de Infancia y Juventud, cargo en el que sigue colaborando, y anteriormente estuvo al frente del Secretariado de Juventud de la Diócesis.

La agresión ha generado una ola de solidaridad hacia el sacerdote, conocido por su cercanía y compromiso con la comunidad. La Policía Nacional continúa investigando para identificar y detener al responsable de este violento ataque, mientras la Diócesis de Málaga y los allegados de Gil confían en su pronta recuperación.