Claves de la relación entre los padres y la tecnología

Aunque al principio parecen resistirse, al final los padres, como a todos nos pasa, acaban cayendo en la tentación del uso de las tecnologías. Así, muchos son los mayores que no dudan en apostar por instalar el WhatsApp, empezar a utilizar una tablet e incluso animarse a navegar por la Red. Si tu padre o tu madre se encuentran entre estos, seguro que has sido testigo de la relación tan curiosa que establecen con la tecnología:

Vocabulario propio

Los padres, por regla general, no llaman a las aplicaciones o dispositivos por su nombre sino que crean otro vocabulario propio. Así, por ejemplo, al WhatsApp o al Facebook les bautizan como “guachá” o “feisbu”.

Auténtica locura

Sus primeros contactos con las nuevas tecnologías son una auténtica locura. Pero no sólo eso, sino que además te vuelven loco a ti. Y es que te consultan en todo momento cualquier aspecto que a ti te parece de lo más normal y habitual. Es más, incluso hacen lo propio con la aplicación o dispositivo en cuestión, consiguiendo que se bloquee. Por eso, hay que tener mucha paciencia, como la que tuvieron contigo para enseñarte a vestirte o a hacerte los nudos de las zapatillas.

Control absoluto

Un elevado porcentaje de padres rechaza en un primer momento la tecnología, sin embargo, una vez la usa descubre su gran potencial. En concreto, tu padre o tu madre se da cuenta que tiene ante sí una herramienta que desconocía para poder controlarte en todo momento:

• Usa el WhatsApp para saber a qué hora te has acostado o levantado.
• Incrementa el contacto que tenía contigo gracias al citado servicio de mensajería instantáneo. Así, varias veces al día te pregunta qué haces, con quién estás o dónde te encuentras.
• Aprovecha su cuenta de Facebook para saber todo de ti y cotillear fotografías y comentarios.
• Si en el WhatsApp colocas como estado una frase que le preocupa, rápidamente te llama para saber qué te pasa.

Errores de principiantes

Los padres, una vez que aprenden el uso de las nuevas tecnologías, se convierten casi en más expertos que sus hijos. Incluso las emplean mucho más si cabe. No obstante, es habitual que, al principio, cometan una serie de errores de principiantes tales como estos:

• Al usar el móvil para intentar hacerte una fotografía, se hacen un selfie.
• Mandan mensajes a personas equivocadas en el WhatsApp.
• Después de varias veces, siguen sin entender cómo se comparte un vídeo o una fotografía.
• Borran imágenes sin querer.
• Se vuelven locos con el autocorrector.
• No tienen claro el significado de los emoticonos que mandan en los “wasaps”.

Otras claves de la relación padres – tecnología

Además de todo lo expuesto, no podemos pasar por alto otras claves de esa relación que empiezan a establecer los padres con el móvil, el ordenador o la tableta:

• Comentan tus fotografías en el Facebook tratándote como a un bebé.
• Tienen miedo a borrar cualquier cosa importante.
• No llegan a comprender cómo, en ocasiones, llegas a aburrirte con las nuevas tecnologías si te ofrecen tantas posibilidades.
• Si te acusaban de tener adicción al móvil, ahora son quienes la sufren.