La Guardia Civil peina la casa del sospechoso del asesinato de Esther López en busca de ADN
Agentes de la Guardia Civil de Valladolid han iniciado en la mañana de este sábado el registro a la vivienda familiar de Óscar, un vecino de Traspinedo (Valladolid) que en las últimas horas ha sido designado como principal sospechoso de la desaparición y asesinato de la también vecina Esther López de la Rosa, con la que mantenía amistad. Los investigadores buscan cualquier rastro de ADN que vincule su muerte con el sospechoso.
Todo estaba preparado para que el registro se realizase en la tarde del viernes, ya que efectivos del Instituto Armado habían acordonado la vivienda. Pero finalmente la entrada en la casa del investigado ha comenzado esta mañana con presencia del titular de la vivienda pero sin asistencia letrada, dado que las diligencias continúan bajo secreto de sumario. Una situación idéntica a la que se produjo en su día con el registro efectuado en la casa de Ramón G.S., otro vecino de Traspiendo investigado, y cuya diligencia se efectuó sin que estuviera presencia su abogada defensora.
Además de las llaves de la casa de Óscar S. en Traspinedo, al investigado se le han requerido las llaves de la vivienda de su exmujer y de sus dos negocios familiares en Valladolid, una agencia de viajes y una inmobiliaria que, previsiblemente, serán objeto de registro.
El Romeral
En esta urbanización El Romeral tiene una casa la familia de Óscar, el hombre que detuvo su coche en una pista de tierra para dejar a una buena amiga sola, de madrugada y a más de una hora a pie de su casa. Esta vivienda es un lugar donde se puede entrar y salir en coche sin ser visto por los vecinos, ya que guarda celosamente su privacidad.
El joven ya relató a los investigadores que en la madrugada del 12 de enero Óscar y Esther recorrieron juntos en coche los 600 metros que separan la rotonda de La Maña en Traspinedo de la entrada a la urbanización El Romeral. Mucho se ha dicho sobre el lugar en el que desapareció Esther, pero hay un dato que se impone sobre el resto: El último lugar donde es vista es Esther se conoce porque lo reveló el propio Óscar, quien lo recuerda perfectamente porque se trata de la entrada a la urbanización El Romeral, lugar donde él asegura haber pasado la noche que desapareció su amiga.
En busca de ADN
El pasado miércoles el citado vecino ya declaró durante casi ocho horas en dependencias de la Comandancia de la Guardia Civil acompañado de su abogado, donde volvió a mantener lo declarado en anteriores ocasiones, al tiempo que su vehículo, un Volkswagen T-Roc, volvió a ser inspeccionado en busca de restos de ADN de la fallecida que puedan incriminarle.
Al día siguiente, Óscar S. acudió con una bolsa en la que portaba la ropa que llevaba el día de autos y en las últimas horas ha sido requerido por el Instituto Armado para que se traslade de la capital, donde vive habitualmente, hasta Traspinedo con las llaves de la casa familiar en la urbanización El Romeral a fin de realizar una inspección en dicho inmueble.
Tras el hallazgo del cuerpo el 5 de febrero en una cuneta a las afueras de Traspinedo, en la carretera N-122, la autopsia reveló que Esther López había sufrido graves lesiones en la cadera, por lo que los investigadores trabajaban desde entonces con la hipótesis de que fue atropellada en esa zona.
Una discusión
La vecina de Traspinedo era buscada desde que sus padres presentaran denuncia el pasado día 17, después de que no diera señales de vida tras haber estado la noche de su desaparición viendo en un bar del pueblo el partido de la Supercopa entre el Barcelona y el Real Madrid y luego continuara la fiesta con unos amigos en casa de uno de ellos y más tarde en unas bodegas.
Esa era la versión que habían facilitado las dos personas con las que estuvo esa noche antes de que se le perdiera el rastro, dos vecinos de Traspinedo, Óscar y Carlos, que viajaron con ella en el coche del primero de regreso a casa y que, según relataron con algunas contradicciones, se detuvo ante el restaurante La Maña.
En el relato ofrecido, Carlos se apeó del vehículo para ir a su casa y luego Óscar y Esther discutieron porque ella quería seguir de fiesta y él la dejó en las inmediaciones, sin que se volviera a saber nada más de la mujer en los últimos veinticuatro días.