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La meralgia afecta a 4 de cada 10.000 personas

Síntomas y tratamiento de la meralgia

La meralgia, o neuropatía sensitiva, es una dolencia ocasionada por la compresión del nervio femorocutáneo, que es el encargado de proporcionar sensibilidad a la zona externa del muslo. Esto hace que quienes la sufren tengan sensaciones anormales en su cuerpo, como entumecimiento, ardor en la parte exterior del muslo, hormigueo o hipersensibilidad, con una mayor incidencia en los hombres. Pero ¿sabes por qué aparece y cómo se diagnostica?

El ejercicio ayuda a paliar el dolor provocado por la meralgia.

¿Por qué se produce la meralgia?

Llevar prendas demasiado ajustadas, como pantalones, corsés o cinturones, la obesidad, el incremento de peso, el embarazo, la realización de movimientos repetitivos de cadera o la presencia de tejido cicatrizal, debido a operaciones previas de cadera o inguinales, son las causas que desencadenan la meralgia. La edad -las personas entre 30 y 60 años son más proclives-, la diabetes y otras enfermedades, como el lupus, son otros factores que pueden originar esta patología.

Los síntomas más comunes son adormecimiento, hormigueo, pinchazos o  ardor en la parte externa del muslo, dolor en la ingle o en los glúteos, hipersensibilidad de la piel o dolor en la parte baja de la espalda. Lo normal es que se presenten en un solo lado del cuerpo y que notes que se intensifican cuando estás mucho rato de pie o después de caminar.

¿Cómo se trata la meralgia?

El tratamiento está orientado a aliviar la compresión del nervio fermorocutáneo. Por ello, tu médico te recomendará utilizar ropa holgada y perder peso, te prescribirá analgésicos y te aconsejará ir a un fisioterapeuta, para que te ayude a mejorar los movimientos y disminuir el dolor. Con estas medidas, los síntomas se mitigan transcurridos unos meses. En muy pocas ocasiones se recurre a la cirugía.