Diferencias entre colesterol bueno y colesterol malo
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El colesterol no es tan dañino como se puede pensar. Lo que realmente es perjudicial para la salud son las altas concentraciones de esta sustancia. Resulta esencial para el organismo, ya que que interviene en la síntesis de algunas hormonas y se integra en las membranas celulares. Los niveles altos de colesterol en sangre se vinculan a un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares. Sin embargo hay que conocer las diferencias entre colesterol bueno y colesterol malo.
Encontraremos esta sustancia en aquellos alimentos de origen animal, aunque también se produce en el hígado, siendo transportado por medio de la sangre a las células.
Recomendable hacer analíticas
De manera periódica hay que realizarse controles y analíticas de sangre para conocer los niveles de colesterol. Bastaría con hacerlos un par de veces al año. Y es que en ocasiones vale más prevenir que curar. En estos análisis aparecerán tanto las lipoproteínas de baja densidad, también conocido como LDL o colesterol malo, como las de baja densidad (HDL o colesterol bueno).
El malo se va acumulando en las paredes de las arterias, creando una placa que impedirá la adecuada circulación de la sangre. Sin embargo, el colesterol malo se ocupará de retirar de las paredes arteriales el colesterol malo.
Para que el corazón goce de una buena salud es preciso que haya un equilibrio entre los dos tipos de colesterol. El bueno debe estar por encima de los 60 mg/dL, mientras que el malo por debajo de los 100 mg/dL. En el caso de que éste rebase los 160, es posible que el médico le aconseje moderar el consumo de ciertos alimentos perjudiciales como pueden ser las carnes rojas, leche entera y derivados lácteos y los huevos.
Los niveles de colesterol malo se verán incrementados considerablemente cuando consumimos en exceso quesos, embutidos y grasas de origen animal. Por su parte, para elevar el colesterol bueno hay que decantarse por una dieta rica en fibra, baja en grasas saturadas y practicar algo de ejercicio con regularidad. Tampoco es bueno que se mantenga unos niveles demasiado bajos de colesterol durante un largo periodo de tiempo, ya que esto resulta igual de negativo que cuando los valores se disparan.
Niveles muy altos
En estos momentos una de cada dos personas adultas en España cuenta con unos niveles de colesterol por encima de los recomendados. Mientras que el hígado fabrica el 80% de esta sustancia, el 20% se ingiere por medio de los alimentos. Cuando los médicos detectan unos valores muy altos suelen imponernos una dieta estricta, libre de grasas saturadas.
Una buena manera para controlar el colesterol malo es a través de la alimentación. Se debe potenciar el consumo de frutas, legumbres, verduras, pescados azules, frutos secos y carnes magras. Y para reducir al máximo la ingesta de grasas, es preferible optar por beber agua en grandes cantidades, suprimir el alcohol, tomar lácteos desnatados o semidesnatados, usar aceite de oliva en la cocina y huir de las bebidas azucaradas.
También hay que eliminar de la dieta las salsas comerciales, la bollería, precocinados, mantequillas y aperitivos salados.