Cómo adelgazar con el souping

El periodo estival modifica muchos de nuestros hábitos, sobre todo los que tienen que ver con la alimentación. El calor nos obliga en cierta manera a disfrutar de platos más frescos. Una buena opción para este verano puede ser el souping, que es una sopa fría elaborada sobre todo con vegetales, verduras y frutas. En este artículo te enseñamos cómo adelgazar con el souping.

Puedes incluir este tipo de sopa en la cena, como un plato ligero, en el desayuno como complemento o incluso a la hora de la merienda. Para disfrutar al máximo de sus propiedades se recomienda que se prepare poco antes de consumirlo. Para que se conserve en buen estado lo guardaremos en un recipiente en el frigorífico para que enfríe.

Las sopas pueden parecerte un alimento aburrido, pero tienes la posibilidad de probar con distintos ingredientes, jugar con los espesores o añadirles complementos sólidos como pan o verduras. En la cocina tradicional española hay dos buenos ejemplos de souping, como son el salmorejo y el gazpacho. Resultan la base adecuada para ir añadiéndole distintos alimentos hasta el punto de conseguir una dieta lo más saludable posible.

Entre las opciones que tenemos se encuentran la sandía, cada día con más presencia en los gazpachos y salmorejos. Con unos cuantos trozos y reduciendo la cantidad de tomate podrás disfrutar de un estupendo plato. Lo agradecerás en aquellos momentos en los que te encuentres falto de energía y el cuerpo te pide algo dulce y saludable. Algo similar ocurre con el melón, aunque se incluye con menos frecuencia en estas sopas frías.

Otro vegetal a incorporar en el gazpacho es la remolacha. Tiene una elevada cantidad de betacaroteno y le aporta el organismo muchas vitaminas. Si deseas añadírselo al gazpacho, solo debes cortar un poco y echárselo para que le dé un toque más dulce.

Otra posibilidad para aportarle un poco de exotismo a tus sopas frías es el aguacate. En el caso del salmorejo o del gazpacho, la clave está en añadírselo reduciendo en la misma proporción la cantidad de tomate que suele llevar. Debido a la textura que tiene, posiblemente te veas obligado a echarle un poco de agua para que no te quede tan espeso.

Como acabamos de comprobar, no resulta tan complicado realizar una sopa fría. Además, el souping resulta de gran ayuda para perder los kilos de más. Sólo es preciso que llenes tu nevera de verduras, hortalizas y frutas, aprovechando sobre todo los productos de temporada. Hay tantas recetas como ingredientes quieras echarle.

Así que ya sabes, este verano luce tu mejor figura gracias al souping y sorprende a tus invitados con esta propuesta tan refrescante y atrevida. Los que prueban, seguro que querrán repetir.