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Receta de Pollo asado con salsa de ciruelas

Si quieres variar tus recetas cotidianas de pollo, prueba esta de pollo asado con salsa de ciruelas. Una deliciosa elaboración que te encantará.

  • Francisco María
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Las recetas de pollo son variadísimas, tal y como lo prueban los miles de recetarios en los que esta ave es protagonista. Este ingrediente admite prácticamente cualquier tipo de cocción y de ingredientes para acompañarlo, y eso es lo bueno. A veces la carne de pollo resulta un poco sosa y falta de sabor, lo que se corrige fácilmente echando mano a diversos ingredientes. Es el caso de este pollo asado con salsa de ciruelas, que recuerda un poco algunas recetas navideñas.

Lo ideal es respetar el tiempo de marinado que, eso sí, debe ser toda la noche, y quedará una carne suculenta y de lo más tierna que se deshace en la boca. El toque caramelizado y dulzón de las ciruelas le dará un giro sorprendente a una receta bastante sencilla. Hay que echar a volar la imaginación cuando se trata de la cocina, y darle la oportunidad a esta ave de tener un plato de alto nivel culinario en nuestra mesa.

Ingredientes:

Cómo preparar un pollo asado con salsa de ciruelas:

  1. La víspera preparar el pollo. Retirar el exceso de grasa y disponerlo en una fuente.
  2. Repartir por encima los ajos pelados y laminados, las ciruelas troceadas y las hojas de laurel.
  3. En un cuenco batir el aceite de oliva con el vinagre de jerez, el vinagre balsámico, las provenzales y pizca de sal y pimienta negra.
  4. Verter este líquido encima del pollo y masajear para que se impregne del marinado.
  5. Tapar con film y reservar en la nevera hasta el día siguiente.
  6. Alrededor de una hora antes de asarlo, sacar el pollo de la nevera para atemperarlo.
  7. Precalentar el horno a 180° C.
  8. Pasar el pollo a una fuente refractaria junto con todos los líquidos de la marinada, incluidas las ciruelas. Salpimentar.
  9. Regar con el vino tinto y espolvorear el azúcar moreno por encima, y luego el perejil.
  10. Hornear a media altura durante una hora, regando de tanto en tanto el pollo con sus jugos sin dejar que se seque.

Sirve el pollo asado con salsa de ciruelas con arroz blanco, con puré de patatas o patatas horneadas, o también con una buena rebanada de pan para mojar en la salsa, en la que las ciruelas se habrán deshecho. Es una buena alternativa para una celebración o comida en familia.