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Feliz Día internacional del Croissant: receta de cruasan de jamón y queso

Esta elaboración de croissant de jamón y queso es una receta que no falla jamás. Te invitamos a probarla.

Croissant de mantequilla

Preparar el mejor croissant casero

Croissant relleno de salchichas

  • Francisco María
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Un croissant de jamón y queso es una tentación siempre. En el desayuno y en la merienda es el protagonista de cualquier mesa. Es perfecto para llevar en una salida de paseo, un día de campo y para agasajar a los compañeros de trabajo en un día especial.

“Croissant” es una palabra francesa que significa  “creciente”.  Por su forma se le llama también “medialuna”.  La historia dice que nació en Austria, en el siglo XVII.  Los franceses lo convirtieron en un  rasgo de identidad propio gracias a María Antonieta, que  era una gran consumidora de este bizcocho.

El croissant de jamón y queso es una de las variaciones más populares. El sabor del jamón y del queso se integra perfectamente con el dulzor y la textura del bizcocho. Al mismo tiempo, se complementan sus propiedades nutricionales, aportando proteínas y vitaminas.

Ingredientes:

¿Cómo se elaboran estos deliciosos croissants con jamón y queso?

  1. En un recipiente colocar el agua tibia y los 30 g de azúcar. Agregar la levadura. Tapar con un paño y dejar reposar durante 15 minutos.
  2. Mezclar esta preparación con la leche y la sal. Añadir los dos huevos ligeramente batidos y 50 gramos de mantequilla blanda.
  3. Incorporar poco a poco la harina tamizada y trabajar hasta que se forme una masa lisa y blanda.
  4. Amasar unos minutos sobre la mesa de trabajo o en amasadora.
  5. Cubrir con un paño y dejar fermentar hasta que haya doblado su tamaño.
  6. Extender papel de hornear sobre la mesa. Colocar encima el resto de la mantequilla. Cubrir con otro papel y estirar con rodillo para formar un rectángulo fino.
  7. Espolvorear con harina otro sector de la mesa y trabajar la masa para quitarle el aire.
  8. Extenderla, espolvorear con harina y colocar encima la lámina de mantequilla.
  9. Doblar la masa desde los extremos hacia el centro, formando un sobre. Volver a estirar y volver a doblar. Repetir este procedimiento cinco o seis veces. Llevar la masa a la nevera durante 30 minutos.
  10. Estirar la masa con forma de cuadrado. Cortarla en cuatro cuadrados iguales y a estos en triángulos.
  11. Sobre cada triángulo, colocar una loncha de jamón y una de queso, cuidando que no cubran los bordes del croissant. Enrollar comenzando por el lado ancho del triángulo hasta el vértice. Darle forma curvada.
  12. Colocar los croissants en una bandeja para horno engrasada y dejar reposar 30 minutos.
  13. Precalentar el horno a 180º. Pintar los croissants con yema de huevo y hornear unos 20 minutos o hasta que estén dorados.

Otra opción que puedes elegir es preparar los croissants sin el relleno y rellenarlos con el jamón y el queso una vez horneados y fríos.

Puedes preparar la masa y tenerla lista en el congelador para cuando quieras hornearlos. La retiras unas horas antes y armas los croissants de jamón y queso cuando está a temperatura ambiente.