El Madrid ya no depende de sí mismo para ser campeón

La derrota contra el Betis ha dejado al Real Madrid en la cuerda floja, ya no depende de sí mismo para revalidar el título de Liga. Al menos eso es lo que dicen las matemáticas. Lo intentaron todo pero hay días que no sale nada y cuando la pelota no quiere entrar es como chocarse contra un muro una y otra vez. En este caso el muro tiene un nombre, Antonio Adán. El meta verdiblanco fue el gran culpable de que los blancos no se llevaran los tres puntos.

Aún es pronto para hablar de que la Liga está perdida, pero sí difícil. Esta derrota ha dejado al Madrid muy tocado, a siete puntos del Barcelona. Todavía quedan 32 partidos para que finalice el campeonato y faltan los dos duelos frente al cuadro catalán. Los de Zinedine Zidane no pueden volver a fallar, necesitan ganar todos los partidos que restan si quieren tener opciones de volver a ser campeones.

Para ganar el título están obligados a ganar los dos Clásicos, tanto en el Santiago Bernabéu como en el Camp Nou. Tampoco pueden permitirse el lujo de pinchar en los derbis contra el Atlético de Madrid. En general no deben ni pueden perder ni un solo encuentro más, ya han agotado el cupo de derrotas posibles en un año y deben empezar a sumar de tres en tres cada partido.

En manos del Barça

El Real Madrid depende del Barcelona para poder conquistar la que sería su Liga número 34. Primero deben cumplir ganando los 32 partidos de Liga que restan, entre los que quedan visitas al Camp Nou, Wanda Metropolitano, San Mamés o Sánchez Pizjuán, entre otros. Pero ni aún así serían campeones si los azulgrana no se dejan puntos, más allá de los dos duelos directos entre ambos.

Para que el cuadro de Zinedine Zidane sea campeón los catalanes deben empatar o perder al menos un partido, siempre contando que el Madrid gana al Barça los dos choques. Todavía es posible, la Liga no ha hecho más que empezar, pero los tres tropiezos en casa (dos empates y una derrota) ponen muy cuesta arriba el título desde el inicio.

Tan sólo se han jugado cinco partidos y restan 32 pero la diferencia entre Madrid y Barça es cada vez más amplia. Pese a que los de Valverde siguen sin mostrar su mejor versión todavía no conocen la derrota, mientras en Concha Espina todavía no han ganado como locales y eso les está pasando factura. Los azulgrana siguen líderes y ya les aventajan en siete puntos tras cinco jornadas.