Si la Complutense quiere investigar la cátedra de Begoña Gómez que pregunte a Paloma Román
Si la Universidad Complutense pretende de verdad investigar cómo fue posible que la cátedra de Transformación Social Competitiva recayera en la figura de alguien como Begoña Gómez, que carecía de méritos académicos al no poder acreditar siquiera una licenciatura, debería empezar por preguntarle a Paloma Román Marugán, profesora de Ciencias Políticas de la universidad y directora de su Escuela de Gobierno -a la que se adscribe la cátedra de Begoña Gómez-. Román Marugán formó parte, junto al vicerrector Juan Carlos Doadrio, de la llamada Comisión Mixta de Seguimiento que avaló la designación de la mujer del presidente del Gobierno.
Sin duda que su opinión servirá para esclarecer los motivos que llevaron a Begoña Gómez a hacerse con una cátedra sin más méritos que el de ser la esposa de Pedro Sánchez. Y es que Paloma Román Marugán, que no ha ocultado nunca sus opiniones políticas, ha dejado escrito que «Sánchez es un líder fuerte e indiscutible» o que Vox supone un «inmenso» peligro para la democracia. Así se ha expresado en algunos artículos y entrevistas publicados en los últimos años, en los que participa como analista política. En ellos, arremete especialmente contra Vox: «Su discurso es de regresión y de eliminación de derechos. Es para asustarse como ciudadano, ¡y ni te cuento como ciudadana!».
Sobre los cinco días de reflexión que se tomó recientemente Pedro Sánchez para amagar con una dimisión fake, Román Marugán, viniéndose arriba, dijo: «Como ave fénix, el presidente dice que sigue, y con fuerza, para liderar una regeneración democrática en un país minado por la crispación». Y concluyó con un solemne «Sánchez tiene un nuevo reto: hay que estar a la altura de lo planteado y lo concluido». Sobre la mesa, escribe, están «la libertad de expresión, los medios de comunicación, y/o el papel de los jueces o sus versiones tóxicas». Ahora se entiende por qué Begoña Gómez se hizo con la cátedra. Y la Universidad Complutense dice ahora que va a investigar. ¿El qué? ¡Si todo está más claro que el agua!