Blanco y en botella: Sánchez contra el sector ganadero español

Que al Gobierno de Pedro Sánchez el sector ganadero español no le hace mucha gracia y que va a poner todos sus medios al alcance para hacerle la puñeta lo demuestra el hecho de que tanto en 2021 como en 2020 el Ministerio de Agricultura adjudicó a una compañía portuguesa dos contratos por valor de más de 17,3 millones de euros a cambio del suministro de leche para donar a las personas vulnerables de nuestro país. O sea, en lugar de inclinarse por las ofertas de las empresas españolas, el Ejecutivo se decantó por la empresa lusa Lactogal-Produtos Alimentares SA, que casualmente presentó la oferta más costosa. Este contrato fue concretamente de 15,16 millones de euros y se tramitó a través del Programa de Ayuda Alimentaria a las personas más desfavorables que depende del Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA. De igual forma, en 2020 el Gobierno presidido por Sánchez  cerró un contrato con esta misma empresa por un importe de más de 2,15 millones de euros, también para el suministro de leche.

Tiene guasa la cosa, porque el pasado diciembre entró en vigor la reforma de la Ley de medidas para mejorar el funcionamiento de la Cadena Alimentaria. El Gobierno vendió que con esta medida los productores verían reforzada su posición negociadora y lograrían «una remuneración digna por su trabajo». Pues bien, en lugar de apoyar a los pequeños ganaderos españoles, Sánchez premia a una empresa portuguesa, cuando alguna de las ofertas nacionales era sensiblemente más barata. Parece evidente que el sector lácteo y ganadero español no cuentan con el favor de un Gobierno que les ha colocado en el centro de la diana. Y como muestra, un botón: con tal de hacerles la puñeta son capaces de adjudicarle un suculento contrato a una compañía portuguesa, aunque fuera a costa de pagar más.

¿Será que las vacas lusas dan mejor leche o será que Sánchez quiere descargar su mala leche sobre el sector ganadero español? Blanco y en botella.