Opinión

Ayuso no se achanta y responde a Sánchez con más rebajas fiscales

Frente a la pretensión de Pedro Sánchez de asfixiar fiscalmente a los madrileños para cuadrar el agujero de su rendición al separatismo con el cupo catalán, la  presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, pondrá en marcha nuevas rebajas fiscales en el impuesto sobre Sucesiones y Donaciones que generarán un ahorro de casi 130 millones de euros anuales a los contribuyentes de la región. Un paso decidido en su voluntad de librar a los madrileños del peso de la losa impositiva del Gobierno. En el impuesto sobre Sucesiones y Donaciones se elevará ya desde este próximo año al 50% la bonificación para las operaciones entre hermanos y entre tíos y sobrinos por consanguinidad, que actualmente se encuentra en el 25%.

Además, se establecerá una bonificación del 100% en el caso de las donaciones esporádicas entre particulares que sean inferiores a 1.000 euros. También se eliminará el requisito formal de otorgamiento de documento público para aplicar las ya existentes. Parece evidente que frente a las recetas dogmáticas de un Ejecutivo empeñado en dar una patada a Ayuso en el trasero de los madrileños, la presidenta de la Comunidad no está dispuesta a plegarse al chantaje de Pedro Sánchez

Todo lo contrario: frente al mensaje fake de un Ejecutivo que repite sin parar el mantra de que Ayuso gobierna para los ricos, medidas como las adoptadas por el Gobierno autonómico revelan la falsedad del discurso de la izquierda, porque las medidas de bajada de impuestos están beneficiando a los más desfavorecidos, como lo demuestra el hecho de que Madrid sea la comunidad donde menos se paga por IRPF en todos y cada uno de los niveles de renta. Por si esto fuera poco, Ayuso subirá un 50% las ayudas a la dependencia e incentivará aún más la contratación. En definitiva, que mientras el modelo fiscal de Ayuso beneficia a todos los trabajadores y empresas, Sánchez se ha propuesto castigar a Madrid por no plegarse a su pretensión de quebrar la igualdad entre los españoles, otorgándole a Cataluña un trato de favor en detrimento de otras comunidades.