Aston Martin Vantage, una actualización necesaria y espectacular

Han pasado 13 años ya desde que conocimos al Aston Martin Vantage. Un tiempo más que suficiente para que haya dado todo lo que tenía dentro de sí. Y vaya si lo ha hecho. Es momento, por tanto, de una renovación que a vista de lo que se nos presenta, le va a sentar la mar de bien. Por ejemplo, estéticamente recuerda en ciertos detalles al DB10. Sí, ese prototipo que solamente ha podido conducir James Bond en la película Spectre. De esta manera cuenta con unas líneas muy afiladas, una aerodinámica perfectamente estudiada y diferentes remates que no hacen sino potenciar la elegancia y la deportividad.

No menos impresionante es el nuevo Aston Martin Vantage de puertas hacia dentro. Aquí contaremos con un puesto de conducción más bajo y con mayor espacio para todos los ocupantes. Además, tanto el cuadro de mandos como la consola central han sido rediseñados, mejorando el acceso a los diferentes controles. Y todo ello aderezado por una conjunción de materiales nobles de última generación como el cuero, el Alcántara o la fibra de carbono.

El puesto de conducción del nuevo Aston Martin Vantage es más bajo que el del modelo saliente.

Las novedades en el apartado mecánico son menos, pues bajo el capó nos encontramos con el V8 biturbo de 4 litros de origen Mercedes-AMG que ya conocemos. Éste es capaz de entregar una potencia de 510 CV y un par máximo de 685 Nm, cifras más que suficientes para lograr una aceleración de 0 a 100 km/h en 3,5 segundos y una velocidad punta de 314 km/h. Todo su poderío se traslada al tren trasero a través de una transmisión automática ZF de 8 velocidades. Además, su comportamiento, como el de la suspensión adaptativa Skyhook, variará en función del modo de conducción elegido -Sport, Sport Plus y Track-.

Dinámicamente el nuevo Aston Martin Vantage promete ser también una maravilla. Para ello se ha limitado el peso hasta unos exiguos 1.530 kilogramos, con un reparto perfecto del 50/50. Todo esto es posible gracias a un chasis con estructura de aluminio trenzado como el que ya vimos en el DB11. Además, la colección de ayudas electrónicas que ofrece el vehículo facilitan mucho la vida a bordo cuando de conducir al límite se trata. Nos referimos a elementos como el control dinámico de estabilidad con dispositivo de reparto de par, la dirección asistida eléctrica, o el diferencial trasero electrónico E-Diff, que puede enviar toda la potencia del motor a la rueda que mejor venga en cada momento según las circunstancias.

El carácter deportivo del Aston Martin Vantage no impide que la marca británica haya dado también lo mejor de sí en lo que a tecnología e infoentretenimiento. Dispondremos en este sentido del In-Car Entertainment, que manejaremos a través de una pantalla LCD de 8 pulgadas situada en la parte alta del salpicadero. Y todo ello sin dejar de comentar que el departamento de personalización de Aston Martin, Q, estará ahí para hacer de nuestra unidad algo más exclusivo todavía. ¿Su precio? En Alemania parte de 154.000 euros.