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Por qué los perros mojados huelen mal: la ciencia revela el verdadero motivo

Perros mojados
Janire Manzanas
  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

¿Sabías que el olor a «perro mojado» tiene una explicación científica que va más allá del simple contacto con el agua? Éste característico y, en ocasiones, desagradable olor es algo que todos los que tenemos un perro como mascota hemos experimentado alguna vez. Pues bien, aunque resulta molesto para nosotros, se trata de un fenómeno natural que está relacionado con los microorganismos que habitan en la piel y el pelaje de los perros.

Cuando un perro se moja, el agua actúa como catalizador, liberando al aire los compuestos químicos que producen las bacterias, hongos y levaduras presentes en la piel y el pelaje. Este fenómeno se da en todos los perros, aunque ciertas razas tienen un olor más fuerte debido a sus características físicas. En cualquier caso, al conocer su origen y adoptar buenas prácticas de higiene, podemos minimizar su impacto y disfrutar de una vida más cómoda tanto para nosotros como para nuestros amigos de cuatro patas.

El olor a ‘perro mojado’

La piel y el pelaje de los perros son el hábitat de una amplia variedad de microorganismos, incluyendo bacterias, hongos y levaduras. Estos organismos cumplen funciones esenciales para la salud de la piel canina, como protegerla de patógenos externos y mantener un equilibrio en el microbioma. Sin embargo, durante su metabolismo, estos microorganismos liberan compuestos orgánicos volátiles (COV), que son responsables de los olores que percibimos.

Cuando el pelaje está seco, estos compuestos quedan atrapados en la estructura capilar y en las capas de la piel. Pero al mojarse, el agua rompe los enlaces químicos que los retienen, liberándolos al ambiente. Esto explica por qué el olor se intensifica inmediatamente después de que el perro se moja. Algunos de estos compuestos tienen olores agradables, como los que recuerdan a frutas o miel, pero otros, como los que evocan azufre o heces, son mucho más molestos.

Factores que influyen en la intensidad del olor

No todos los perros emiten el mismo grado de olor a «perro mojado». La razón principal está en las diferencias físicas y genéticas entre razas, así como en los cuidados que reciben.

Algunas razas son más propensas a desarrollar un olor fuerte debido a su tipo de piel y pelaje. Los perros con la piel arrugada, como los shar peis, bulldogs y carlinos, tienden a retener humedad en los pliegues de su piel, lo que crea un ambiente propicio para la proliferación de microorganismos. Las razas con pelajes gruesos o aceitosos, como los basset hound, también producen mayores cantidades de sebo, intensificando el olor al contacto con el agua.

Los perros de razas grandes, como los mastines, dogos y terranovas, suelen babear más, lo que da lugar a zonas húmedas constantes alrededor de su boca. Estas zonas húmedas se pueden convertir en focos de microorganismos si no se limpian con regularidad.

Un olor más fuerte de lo habitual también puede ser un indicativo de problemas de salud, como infecciones cutáneas, dermatitis o alergias. Estas condiciones alteran el microbioma natural de la piel, favoreciendo el crecimiento de bacterias y hongos que producen olores más intensos.

Consejos prácticos

Aunque es imposible eliminar completamente este olor, existen medidas que pueden ayudar a reducir su intensidad y frecuencia:

  • Es importante bañar al perro una o dos veces al mes con un champú adecuado para su tipo de piel. Más crucial aún es asegurarse de que el pelaje esté completamente seco después del baño. Utilizar toallas absorbentes de alta calidad y un secador de pelo con temperatura controlada puede marcar la diferencia.
  • Durante los paseos bajo la lluvia, vestir al perro con un chubasquero impermeable ayuda a minimizar la acumulación de humedad en su pelaje, reduciendo así la liberación de compuestos volátiles.
  • Los collares, arneses, camas y juguetes también acumulan microorganismos y olores con el tiempo. Lavarlos regularmente es esencial para evitar que se conviertan en fuentes persistentes de malos olores.
  • Si el perro tiene pliegues en la piel o zonas que se humedecen con frecuencia, como alrededor de la boca, hay que limpiarlas con toallitas especiales o un paño seco para evitar la proliferación de microorganismos.

Cuándo consultar al veterinario

Si el olor corporal del perro es especialmente fuerte, persistente o se acompaña de síntomas como enrojecimiento, irritación o áreas inflamadas en la piel, podría ser un signo de un problema de salud que necesita atención veterinaria. Los olores desagradables suelen ser un síntoma de infecciones bacterianas, hongos o incluso afecciones más complejas como dermatitis seborreica, alergias cutáneas o problemas hormonales.

Las infecciones bacterianas y fúngicas son causas comunes de olores inusuales. Estas afecciones suelen desarrollarse en zonas húmedas o pliegues cutáneos, donde los microorganismos encuentran un ambiente ideal para proliferar. Además, la dermatitis seborreica, una condición que causa una producción excesiva de sebo en la piel, puede intensificar los olores cuando no se trata como es debido.

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