Nunca hagas esto si estás en Madrid y no quieres llevarte una multa de 700 euros

Una multa de 700 euros puede caerte en Madrid si haces algo que quizás te sale de forma automática o se convierte en un descuido. La Comunidad de Madrid ha elaborado una normativa propia para preservar sus calles de la suciedad común que está presente en otros lugares del país. Las botellas de cristal se han convertido en un peligro y un deshecho que puede evitarse, potenciar el reciclaje y evitar la basura en las calles o molestar a los madrileños implica la creación de sanciones que pueden llegar hasta los 700 euros.

Madrid multará con 700 euros a todo aquel que haga esto

El ruido y la contaminación son los dos elementos que se han convertido en grandes enemigos de la Comunidad de Madrid. La capital de España puede presumir de unas calles limpias y de una calidad de vida excepcional. El secreto no es otro que una normativa propia que ayuda a los madrileños y a todos los que visitan esta ciudad.

Las botellas vidrio son las grandes enemigas del ruido y la contaminación. Las nuevas ordenanzas prohíben que se arrojan residuos de vidrio en los contenedores dedicados a tal fin a partir de las 22.00 horas. Un poco de cuidado a la hora de tirar estos elementos, estaremos atentos a la hora para no ser multados con una cantidad de dinero significativa.

El motivo además de medioambiental es la contaminación acústica que produce. Puede interferir en el descanso de los ciudadanos. La calidad de vida en la gran ciudad es un elemento que preocupa a los creadores de estas normativas y a los responsables de que se viva bien esta comunidad autónoma.

La multa por romper las reglas puede llegar hasta los 750 euros. Es importante conocer toda la normativa para evitar cualquier inconveniente o elemento que interfiera en la salud de los habitantes de esta ciudad. Para conseguir darles las mejores condiciones de vida en un entorno seguro las leyes actúan.

Un gesto habitual o casi involuntario puede suponer una sanción considerable en una comunidad autónoma que se preocupa por la salud de sus habitantes. Se lucha para conseguir que todos ellos dispongan de un entorno limpio, con los ruidos y olores totalmente controlados. No solo el vidrio se multa, también depositar cartón en los pies del contenedor, sin tirarlo dentro, supone una multa de entre 200 y 2.000 euros. La imagen de la ciudad se ve con estos gestos perjudicada, además de que pueden ser peligrosos para personas de movilidad reducida, ante la acumulación de residuos en la calzada.