Rohaní asegura que “echarán a Estados Unidos” de Oriente Medio

“Esto fue solo una bofetada a Estados Unidos. La venganza es otra cosa”, ha asegurado el líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, durante un discurso a la nación. “La presencia estadounidense de propagación de la corrupción en Oriente Medio debe terminar. Han traído sedición y destrucción a la región, e insisten en llevar este tipo de corrupción a nuestro país. La negociación es un preludio de eso. Esto debe terminar, porque las naciones de la región no lo aceptan”, ha agregado.
Por su parte, el presidente del país, Hasán Rohaní, ha declarado que “Estados Unidos cortó la mano de Soleimani; nosotros les cortaremos la pierna y les echaremos de la región”
Para los expertos iraníes, esto significa que “la venganza ya ha sido cobrada en la esfera militar y que el siguiente paso es expulsar a Estados Unidos de la región, donde la República Islámica centrará todos los esfuerzos”.
Mientras, el portavoz del Gobierno iraní ha asegurado que Teherán “no persigue una guerra con Estados Unidos, sino que la ofensiva aérea ha sido una respuesta al asesinato de su principal comandante”. “Apreciamos el ataque preciso de la Guardia Revolucionaria Iraní (IRGC, por sus siglas en inglés) de esta madrugada […] Sin enfrentar ninguna defensa aérea, llegamos al centro del terrorismo estadounidense en la región”. Sin embargo, ha aseverado que “si muestran alguna reacción, daremos una respuesta más dura”.
En esta línea, el embajador de Irán ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Majid Takht-e Ravanchi, ha remitido una carta a la entidad internacional para denunciar la naturaleza “ilegal” y “provocativa” de las amenazas emitidas durante un período corto de tiempo considerablemente corto por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, según ha informado el medio local Press TV. El mandatario del gigante norteamericano publicó, en su cuenta de Twitter, su intención de atacar “52 sitios iraníes (que representan a los 52 rehenes estadounidenses tomados por Irán hace muchos años), algunos de muy alto nivel e importantes para la cultura”.
“De conformidad con el derecho internacional y al ejercer su legítima defensa, Irán tomará las medidas necesarias y proporcionadas contra cualquier amenaza o uso de la fuerza. Esto está de acuerdo con su derecho inherente en virtud del Artículo 51 de la Carta de Naciones Unidas, e Irán no dudará en ejercerlo cuando sea necesario”, se puede leer en la emisiva remitida ante la ONU.
Un responsable de la IRGC ha asegurado que han identificado “104 objetivos de las posiciones de los estadounidenses y sus aliados en la región” y que, si estos vuelven a “cometer un error”, “esas posiciones serán atacadas”, en unas declaraciones recogidas por la agencia local Tasnim.
El ataque iraní se ha producido en la madrugada de este miércoles contra la base militar de Al Asad -operada de forma conjunta por Irak y EEUU- y la base de Erbil, en el Kurdistán iraquí, a la misma hora que el Pentágono lanzó la ofensiva aérea que acabó con la vida del general iraní comandante de las Fuerzas Quds Qassem Soleimani y del vicepresidente de las milicias iraquíes pro-iraníes Hashd al-Shaabi, Abu Mahdi al-Muhandis.
Según ha declarado un alto cargo de la IRGC, el ataque, en el que estuvieron involucrados 22 misiles de corto alcance, ha provocado “graves daños en drones y helicópteros de Estados Unidos” y ha dejado un saldo de, al menos, 80 “terroristas estadounidenses” muertos, en referencia al personal militar. Por el momento, Washington no ha informado de ninguna baja entre sus efectivos y el presidente Donald Trump, quien está previsto que ofrezca un discurso en la tarde de este miércoles, se ha limitado a publicar en su cuenta de Twitter que “¡Todo está bien!”.
En este contexto, el Pentágono ha informado recientemente de que las dos bases, Al Asad y Erbil, se habían preparado “en previsión de una respuesta de represalia de Irán”. El medio emiratí Al Hadath ha comunicado, en esta línea, que “El Ejército de EEUU recibió una alerta temprana del ataque con misiles iraníes”.
Otros países que albergan tropas en la instalación militar de Al Asad, como Noruega, Dinamarca, Canadá, Polonia, Lituania o Alemania ya han desmentido víctimas mortales entre sus nacionales. Del mismo modo, la agencia iraquí de noticias ha comunicado que tampoco se han producido bajas entre las tropas del país de Oriente Medio.
Este miércoles también se ha conocido la decisión que han adoptado tanto Francia como España de reubicar a parte de sus militares desplegados en Irak en Kuwait. Relativo a este último caso, según ha informado Gonzalo Araluce, “en Bagdad ya solo quedan tres de los trece militares españoles que había en la misión de la Alianza Atlántica”.