Internacional
ATAQUE A ISRAEL

López-Istúriz en el kibutz de la matanza de Hamás: «Rajaron a las embarazadas para sacarles los bebés»

Una delegación de la UE visitó este lunes varias de las poblaciones israelíes que atacó brutalmente Hamás

Se ven casas arrasadas, disparos en las ventanas, charcos de sangre e incluso guarderías atacadas

El eurodiputado del PP Antonio López-Istúriz White ha sido una de las personas que ha podido acceder este lunes al kibutz de Beeri, atacado por Hamás en el sur de Israel. Uno de los más afectados por la barbarie terrorista desplegada en su ataque masivo del pasado 7 de octubre, cuyo balance de víctimas se eleva por encima de las 1.300 personas.

Las imágenes de destrucción captadas por el eurodiputado se acompañan de los relatos de los supervivientes, que explican cómo los terroristas rajaron el vientre a embarazadas «para sacarles los bebés y matarlos cuando sus madres aún estaban vivas». No lejos de allí, Israel ha mostrado una fila de containers con cuerpos, miembros y cabezas decapitadas por los terroristas de Hamás.

Las calles de Beeri, población israelí desconocida hasta el ataque de Hamás, han sido escenario este lunes de la vista de un grupo de periodistas y políticos, a quienes Israel ha querido mostrar pruebas de lo ocurrido aquel día. Entre quienes pudieron acceder a la población y ver las huellas que dejó Hamás tras su paso se encuentra el eurodiputado del PP Antonio López-Istúriz. OKDIARIO ha podido conocer las imágenes y los estremecedores relatos que ha recogido de primera mano el europarlamentario español.

«Pueden ver el destrozo, ropa de niños, juegos abandonados, gente asesinada… toda esta vivienda ha sido arrasada», relata López-Istúriz desde el kibutz cercano a la frontera de Gaza. Es una de las poblaciones donde los yihadistas entraron a sangre y fuego en el que ya se considera como el ataque a civiles más cruel desde la fundación del Estado de Israel.

«Es horroroso», relata López-Isturiz tras visitar una de las viviendas afectadas por el ataque de Hamás. Lo que antes era un salón, con sus sofás y su televisión, ahora es una estructura arrasada llena de escombros, con ropa y juguetes tirados por el suelo. Mientras muestra la panorámica de la vivienda se oye de fondo, cerca, el ruido de la artillería israelí afanándose contra las posiciones de Hamás.

Kibutz de Beeri atacado por Hamás

El kibutz de Beeri está en una población tranquila de apenas 1.000 habitantes en pleno desierto del Neguev, donde la mayoría de personas se dedicaban a la agricultura. Un kibutz, como los israelíes llaman a estas pequeñas comunidades agrícolas, que se fundó en 1946, dos años antes incluso del nacimiento oficial del Estado. Desde el pasado 7 de octubre, la población no volverá a ser la misma: aquí se ensañó especialmente Hamás en su ataque. El 10% de la población fue asesinada, y otra parte importante aún permanece como rehén de los terroristas a la espera de conocer su suerte.

Fueron alrededor de 70 los terroristas de Hamás que se ensañaron con el kibutz de Beeri. Todos ellos armados con fusiles y explosivos, como muestran las imágenes grabadas con cámaras tipo GoPro que difundieron en días posteriores los propios terroristas.  «Va siendo hora de que en España y en Europa veamos qué es lo que ha pasado aquí», señala López-Isturiz.

Al eurodiputado aún le tiembla la voz cuando recuerda lo que los supervivientes del kibutz le han relatado a la delegación de personalidades que ha visitado la población israelí este lunes: «Nos han contado historias de mujeres embarazadas a las cuales les arrancaron los bebes y los mataron delante de ellas todavía vivas. Nos han contado violaciones, lo que ocurrió en ese festival de la música por la paz… espero que todos sepamos bien qué es lo que está ocurriendo aquí», señala el eurodiputado español.

La delegación fue acompañada por miembros de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) por la localidad, mientras se les explicaban algunos de los detalles de lo sucedido. Pudieron ver cómo las vallas de metal de la guardería local, justo donde se encuentra la zona de juegos, estaban atravesadas por balas de gran calibre. Fueron tiroteados aquel día por los terroristas. «Esto les dará una muestra de los monstruos con los que lidiamos aquí», asegura un soldado que hace de guía.

Istúriz ha visitado, además, otros kibutz arrasados por Hamás, así como la base militar de Shura, y se han reunido con el alcalde de Sderot. Uno de los principales objetivos de las lluvias de cohetes que cada varios días lanza Hamás y que hoy es una «ciudad fantasma»: su población ha huido masivamente ante el terror desplegado por los yihadistas.