Pasos para arreglar una mesa coja

Si tenemos una mesa con alguna de las patas más corta que las otras, eso no necesariamente quiere decir que hay que descartarla. Siempre que sepas cómo arreglar una mesa coja vas a poder resolver el problema, y colocarla en uno de los ambientes de tu casa.

El caso es que es prácticamente imposible usar una mesa coja porque el desequilibrio no permite realizar casi ninguna tarea sobre ella. Comer, estudiar o incluso trabajar se vuelven labores desagradables, y por eso es urgente encargarnos de solucionar el inconveniente.

Cómo arreglar una mesa coja

Puede que creas que es porque una de las patas de la mesa es más corta que las demás, pero lo cierto es que tiene mucho más que ver la inclinación del suelo y también la física.

El porqué las mesas cojean tienen que ver con la geometría euclidiana.Si tenemos en cuenta que una superficie plana es una superficie bidimensional formada por un número infinito de puntos de coordenadas “X” e “Y” situados a la misma cota o “Z”, y tenemos en cuenta la teoría de Euclides en la que la unión de dichos puntos se hace con rectas da como resultado que una superficie plana simboliza un triángulo.

Necesitas

• Una llave inglesa
• Un destornillador
• Pegamento
• Una cuchilla universal
• Cuñas de goma

Pasos

1. Las patas de la mesa serán lo principal por lo que esta cojea. Es por eso que lo primero que debes hacer es voltear la mesa y examinar las patas.
2. También debes verificar si están sueltas. Matén la mesa firme, agarra cada pata e intente moverla de lado a lado.
3. En la gran mayoría de los casos, las patas de la mesa se fijan con tornillos o pernos.
4. Sin embargo, si las patas de tu mesa están fijadas en su lugar con pernos, necesitarás una llave inglesa.
5. Si bien esto es bastante raro hoy en día, otra posibilidad es que las patas de tu mesa estén despegadas.
6. Aplica el pegamento entre la pata y la mesa y coloca la pata en la posición correcta.
7. Después de haber apretado los tornillos o pernos en tu mesa lo más firmemente posible, tu mesa ya no debería tambalearse.
8. Con suerte, deberías haber terminado.
9. Verifica la posición de la mesa en el suelo.

Por supuesto, lo primero que tienes que hacer es detectar el origen del cojeo de la mesa, que suele estar relacionado con sus patas, probablemente porque alguna de ellas está más corta que las demás. Esa diferencia de longitud la inclina hacia la pata recortada.

Con una cinta métrica y un nivel mide la diferencia en milímetros o centímetros entre esa pata y las demás, y busca algún material básico como el corcho, recortándolo en forma de disco, para dejarlo debajo de la pata. Si le va bien quítalo, añade un poco de cola y pégalo.

Otra opción es hacerlo con un trozo de madera, aunque en ese caso no puedes pegarlo con cola sino que tienes que ajustarlo con clavos. Como la cabeza del clavo va a sobresalir, es recomendable que le añadas luego un pedazo de tela para que no vaya a rallarte el suelo.

Si tienes una ferretería cerca y quieres una salida más profesional, los tacos que se venden en estas tiendas son ideales para ello. Generalmente traen una cinta de pegamento en uno de los lados, por lo que adherir los tacos a la mesa no es demasiado difícil.

Finalmente, si nada de todo eso va bien, solamente queda limar las otras patas para que todas queden de la misma altura.