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Aurah Ruiz necesitó ayuda psicológica tras romper con Jesé Rodríguez

Aurah Ruiz sigue sincerándose

Aurah Ruiz se ha sincerado de nuevo en su canal de ‘MTMAD’ y ha contado uno de sus episodios más difíciles: cuando Jesé Rodríguez, el padre de su hijo, despareció en el peor momento de su vida y la del niño. 

La exconcursante de ‘GH VIP 6’ recuerda lo que sintió y cómo vivió el comunicado que dio el futbolista en redes sociales sobre el fin de su relación y cómo afrontó los primeros días sola. Aurah Ruiz, en todo momento, ha querido dejar claro que fue Jesé Rodríguez quien inició la ruptura pública: “Recuerdo que algo por dentro se rompió en pedazos y solo tenía la opción de llorar. Mi reacción fue hacer yo también un vídeo respondiendo a lo que me acaba de enterar por redes sociales. Hice lo mismo que él: Un comunicado y una respuesta pública”.

Además, ha recalcado que él hizo las cosas mal, que si quería romper tendría que haberlo hecho con ella personalmente: “Si quiere romper, que él me llame por teléfono. Habla conmigo y me deja”. En este capítulo ha relatado los momentos tan duros junto a su hijo, muy enfermo en el hospital: “Me sentí abandonada en el peor momento de mi vida. Acababa salir de una operación donde casi pierdo al niño, pero acababa de perder a su padre”.

Aurah Ruiz ha mostrado en todo momento madurez, ya que tras enterarse de que Jesé se separaba de ella, lo llamó en varias ocasiones, pero no obtuvo respuesta. Aunque si le contestó por mensaje. Ella no volvió a ponerse en contacto con él: “Ahora sí tenía paz. Iba a centrarme solo en mi hijo”. Hasta que, por necesidad económica tuvo que hablar con él, pero él se negó en todo momento: “Me dijo búscate la vida. Habla con un abogado”.

Lo que el futbolista no entendía es que, si ella no tenía dinero para comer, tampoco tenía para poder pagarse un abogado: “Gracias al hospital y a las enfermeras pude comer”. Además, también cuenta que su ex pareja canceló la habitación donde se hospedaba al lado del hospital y que el personal sacó todas sus cosas y las de su hijo.

“Venía un psicólogo del hospital y le contaba lo que estaba viviendo. Me decía que no podía decir nada porque lo estaba haciendo muy bien. Aunque yo tenía ganas de tirarme por la ventana porque no podía más. No duermo, no como, no tengo hambre”, ha confesado entre lágrimas emocionandonos. Por suerte, Aurah ha podido con todo eso y más y ahora es más fuerte que nunca.