Los vecinos de San Blas denuncian la impunidad de los ‘narcookupas’: «Que la izquierda venga a verlo»
Nuestro reportero, Cake Minuesa, ha sido testigo de la detención de uno de estos okupas
Unos okupas apuñalan al propietario cuando intentaba entrar por la ventana para recuperar su casa
Apuñalado un miembro de Desokupa durante un desalojo en Majadahonda
OKDIARIO se ha desplazado hasta el barrio madrileño de Simancas para vivir en primera persona la manifestación a la que han acudido los vecinos de la zona para protestar contra la realidad que están viviendo cada día: el aumento descontrolado de okupas narcos.
Nuestro reportero, Cake Minuesa, ha sido testigo de la detención de uno de estos okupas, concretamente del que había okupado un local que, según nos ha contado su dueño, Fernando Bastante, se disputan entre los narcotraficantes y ahora permanece precintado por la Policía. Pero no sólo eso. Las cámaras de este periódico han captado las imágenes que demuestran la peligrosidad en la zona: drogadictos accediendo sin ningún tipo de impedimento a una casa que la policía, los políticos y los vecinos conocen por su tráfico de drogas.
Todos los vecinos se han unido para hacer fuerza en la convocatoria ‘Simancas sin manguis’ y al grito de «Fuera narcos de nuestros barrios». Y es que, a pesar de la detención de uno de ellos, todos temen que únicamente sea un episodio más de esta pesadilla que parece no terminar nunca: la de convivir a diario en Simancas con okupas narcos.
José Luis Ruiz, diputado de VOX en la Asamblea de Madrid, ha acudido a la movilización para apoyar a los vecinos y transmitir de la misma manera en lo que se ha convertido el barrio: «Hay muchos narcopisos, han proliferado, además están usando la propiedad privada que no se respeta desde hace mucho tiempo y esto va a más. Imaginaos cómo se sienten las familias del barrio».
Por su parte, el propietario del local ha relatado en exclusiva a OKDIARIO el drama de no poder ejercer la posesión de su propio local durante meses: «Lo compré hace un año y medio y desde entonces ha sufrido cuatro okupaciones consecutivas a las que no he llegado a tiempo. Es propiedad de alguna mafia que lo va vendiendo de unos a otros». Fernando pide, en consecuencia, «una legislación en condiciones que proteja al propietario».
A él se ha sumado otra vecina que ha asegurado tener okupas tanto encima como debajo de su vivienda, y ser testigo por ello de continuas situaciones violentas. La entrevistada no ha dudado en mandar un mensaje ante la negación de la okupación por parte de la izquierda: «Que se vengan a verlo, que yo les abro».
Laura Cid, de Mi barrio Seguro, nos ha acompañado a una casa conocida por todos los vecinos, por el menudeo diario tanto de día como de noche en la venta de drogas. Alrededor, decenas de vecinos coinciden en sus declaraciones a OKDIARIO: son testigos cada día y a todas horas del consumo de drogas y han perdido tanto la seguridad como la esperanza.