Vecinos de Chueca piden paralizar la reforma de la plaza Pedro Zerolo: «Va a ser un botellódromo»

Los vecinos han acusado al Ayuntamiento de Madrid de haber decidido «unilateralmente» un proyecto de reforma para la plaza Pedro Zerolo, el cual está a punto de adjudicar, «en contra de la mayoría de los vecinos de la plaza y del barrio, que ven que destruye su plaza vecinal».

Asimismo, han criticado que se trata de «un proyecto carísimo», ya que «costaría la desmesurada cantidad de más de 3,2 millones de euros», lo que equivale, según sus cálculos, a un tercio de lo que costó reformar toda la Gran Vía y poco más de lo que costó la reforma de 11 calles en Chueca.

Los vecinos justifican su rechazo al proyecto al entender que el diseño «plantea un cambio de usos y de funcionamiento de la plaza que empeorará el medio ambiente del entorno y la calidad de vida de las personas que viven allí».

«El diseño que quiere imponer Carmena es el de una plaza a modo de auditorio para la celebración de eventos/conciertos al aire libre, con zonas muy atractivas para concentrar grandes botellones y una gran zona despejada para el uso permanente de la carga y descarga de camiones», ha explicado el colectivo, que destaca que esto implica «ruido permanente, en una plaza clasificada por el propio ayuntamiento de Madrid como de ‘Alta Contaminación Acústica’».

Además, ha advertido que el proyecto «reduce a una mínima expresión la zona de juegos infantiles, que perdería el 75 por ciento del espacio que ocupa y sería trasladada junto a la zona de fumadores de una gran terraza-bar», al tiempo que «elimina la zona de fuente y descanso, y la vegetación adulta de la plaza».

Igualmente, ha criticado que «el nuevo diseño propone praderas de carísimo mantenimiento» y «que acabarán secas y abandonadas», así como «bancos corridos que invitan al botellón y al grafiti».

Los vecinos aseguran que este espacio es «una plaza vecinal muy usada a pesar de que en los últimos años el ayuntamiento la ha descuidado: sus zonas verdes y la zona infantil (una de las pocas del barrio) sufren falta de limpieza y de mantenimiento, o la invasión de parte de la plaza por una terraza gigante que eliminó la amplia zona central donde jugaban los niños».

Tras acusar al Ayuntamiento de negarse a iniciar un proceso de diseño conjunto con los vecinos y a atender la petición aprobada en el pleno ordinario del distrito de Centro del mes de febrero sin oposición de ninguno de los grupos, han instado a Carmena a que paralice este proyecto «de manera urgente».