España

Podemos engaña a PP, PSOE y C’s: seguirá pegando carteles con la excusa de que lo hacen voluntarios

Los partidos acuerdan suprimir la publicidad exterior. De puertas hacia dentro de la reunión, todos de acuerdo. Cuando llega el turno de Podemos en rueda de prensa, anuncian que suprimirán ese gasto pero seguirán pegando carteles ya que cuentan con voluntarios. Indignación en la sala entre el sector popular.

Los partidos no se ponen de acuerdo ni en la manera de reducir los gastos de campaña. Este jueves y a petición de UPN, todas las fuerzas parlamentarias se sentaron a negociar un recorte general del 30% y eliminar la publicidad exterior que consiste en los carteles que vemos pegados en las farolas, banderines, marquesinas, vallas publicitarias y todos aquellos soportes que se instalan en lugares públicos o donde se desarrollan espectáculos, eventos culturales o encuentros deportivos. Aunque existió gran discusión sobre lo que se considera publicidad exterior. Según los cálculos de las formaciones, prescindir de esta opción reduciría de por sí un 20% el presupuesto. Los diputados dejaron claro que, ante todo, “tiene que haber igualdad de condiciones” entre todas las formaciones. Parece que esto no le quedó muy claro a los de Podemos, que nada más salir y en rueda de prensa dejaron ver que este gasto “es insuficiente” con lo que han demandado al resto de fuerzas, pero se comprometen a cumplirlo. Acto seguido su representante, Segundo González, explicó que la formación morada no hizo apenas gasto sobre este punto ya que cuentan con voluntarios “que seguirán pegando carteles”, advierte.

«Eliminar la publicidad exterior es una medida adecuada pero tímida que implica poca reducción de gasto en lo que nosotros planteamos. Nosotros dependemos de aquellos que pegan carteles voluntariamente. Ellos hablan de lo que hay que pagar por tener soporte, así que no es lo mismo”, dijo con labia. Las pasadas elecciones al 20D, Íñigo Errejón dijo, sin citar a Ciudadanos, que mientras hay formaciones que «pagan autobuses, reparten bocadillos y regalan banderitas», en Podemos tienen «voluntarios» y gente que «levanta las banderas hechas en casa”.

Las palabras provocaron el enfado en algunos círculos del PP, quienes dijeron por lo bajo que los populares también cuentan con muchos voluntarios, “pero se les paga por ese trabajo”, aseguran. “Tienen mucho morro”, comenta otro diputado presente en la sala. Explican que el motivo principal es el gasto, pero esperan que si todos se ponen de acuerdo, «no vengan voluntarios a inundar las calles con cartelones de Podemos y respeten la igualdad de todas las formaciones». Algunos diputados insisten en que hay que obedecer la ley que es, en este caso, la que regula dónde se puede fijar publicidad y en las elecciones anteriores denuncian casos donde los de Pablo Iglesias tuvieron que retirar sus carteles al estar prohibido. Asimismo, recuerdan que la Ordenanza General de Protección de Medio Ambiente, concretamente en su artículo 142.1, prohíbe la colocación de carteles o hacer pintadas en «paredes, muros, quioscos, cabinas, farolas, vallas y papeleras”. Algo que vimos las pasadas elecciones por las calles de toda España.

Uno de los casos sucedió en Oviedo, donde el pasado diciembre los populares llevaron a Podemos e IU a la Fiscalía por no retirar sus respectivos carteles electorales (fijados en sitios prohibidos) que usaron durante las dos campañas que hubo el año pasado: la de las elecciones municipales en mayo y la de las elecciones generales en diciembre. Los populares aseguraron que los dos partidos cometían un delito al difundir propaganda fuera de campaña lo que, según el artículo 144 de la Ley de Régimen Electoral, está penado hasta con un año de cárcel. «Fijan carteles donde quieren y luego los dejan ahí. Eso está prohibido», dijo en su momento el representante del PP en Oviedo. Esperanza Aguirre también avisó a la alcaldesa madrileña, Manuela Carmena, que debía de retirar toda su cartelería, colocada en lugares prohibidos, bajo pena de multa. La popular insistía que su partido y Ciudadanos habían cumplido y la mayor parte de los que quedaban eran de Podemos, IU y alguno del PSOE, “que no cumplieron”, señaló y continuó diciendo: «Podemos acapara la inmensa mayoría de los carteles pegados contra la normativa municipal, cuya retirada tiene que costear». Los populares insisten en que esta vez se cumpla la ley y “que cumplan lo que dicen, igualdad para todos”, indicaron.

La formación de Pablo Iglesias calcula que su gasto para esta campaña serán 2,2 millones de euros, que finalmente con las confluencias “acaban siendo 2,9 millones como en la pasada campaña”, indican y apostillan, “pero nunca nos vamos a pasar de 3 millones e invitamos al resto de fuerzas a que nos imiten”, destacó el diputado asturiano. Finalmente, las formaciones quedaron en tablas y se emplazaron para desempatar el miércoles que viene. Concretaron que hay que recortar los gastos de campaña, pero no se pusieron de acuerdo en la manera de reducirlos. Las grandes desavenencias fueron dos: el mailing y en si la reducción de costes debe ser sobre el techo de gasto que establece la ley o sobre el gasto real que hubo en la campaña anterior.Los socialistas y populares proponen reducir un 30% lo que formación invierte sobre lo gastado en la campaña electoral del 20 de diciembre. Sin embargo, los partidos emergentes (tanto Podemos como Ciudadanos) reclaman que esa reducción se haga sobre el límite de gasto legal que están obligados a cumplir.

Respecto al mailing, PSOE y PP quieren que se sigan enviado cartas a todos los ciudadanos. Podemos y C’s plantean que haya un envío general con la propaganda de todos los partidos. Según los cálculos de anteriores comicios, casi 50 millones de euros, está destinado al presupuesto del ‘mailing’. En las elecciones del pasado 20 de diciembre, el PP gastó 12 millones de euros; el PSOE, sin mailing, gastó nueve millones; Podemos y sus confluencias gastaron 2,9 millones y Ciudadanos gastó 3,4 millones en la campaña.