España
Ley del 'sólo sí es sí'

Sánchez se jactó de la ley que excarcela a abusadores: «Feminismo para construir un país más seguro»

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

La anunciada rebaja de penas por la ley del sólo sí es sí es ya una realidad que ha agitado de nuevo al Gobierno. La elaboración de esta norma fue compleja por los desencuentros entre PSOE y Podemos, pero lo cierto es que, finalmente, el Consejo de Ministros la alumbró el 6 de julio de 2021 y todos sus miembros la aplaudieron en pleno. Incluido Pedro Sánchez, que ahora se pone de perfil ante el incesante goteo de excarcelaciones de delincuentes sexuales.

«Hagamos de nuestro país un lugar más libre y seguro para las mujeres. Con la ley del sólo sí es sí protegemos su derecho a la libertad sexual y continuamos trabajando para erradicar la violencia contra ellas. Construyamos una sociedad donde todas/os vivamos sin miedo y en igualdad», celebró el presidente socialista el mismo día de su aprobación. Atrás quedaban los cruces de declaraciones entre el entonces ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, y el vicepresidente Pablo Iglesias, quien le llegó a calificar de «machista frustrado» por sus objeciones al texto.

Ya en 2020, el socialista celebraba que la ley estrella de Montero «volverá a situarnos a la vanguardia». «Feminismo para seguir construyendo un país más seguro, una sociedad mejor», decía Sánchez.

El último informe Cumpliendo, en el que el Gobierno hace balance de las medidas aprobadas, también recoge en destacado la ley como una de las «iniciativas más relevantes».

Revisar la ley

En la parte socialista del Gobierno se asume ya que habrá que revisar la ley, aunque son varios los obstáculos que complican esa vía. Para empezar, el choque con Podemos. La ministra de Igualdad se ha dedicado a responsabilizar a los jueces por su «machismo» y su supuesta falta de formación. Incluso les ha acusado de prevaricar, al igual que otros altos cargos de su departamento. La brutal ofensiva contra la magistratura ha llevado incluso al CGPJ a emitir un comunicado en el que califica de «intolerables» estos ataques y advierte de que pueden propiciar una mayor «desprotección de las víctimas» por su merma de confianza en las instituciones. Los jueces, alega el organismo, no hacen otra cosa que cumplir con la Constitución y el Código Penal, que obliga a revisar las condenas en caso de que la ley vigente resulte más favorable al reo.

La reforma de la norma será pues un trámite complejo y en el Ejecutivo admiten ya un reguero de excarcelaciones. ¿Cómo hacerlo? Ni siquiera eso está claro. Preguntado por este asunto, Sánchez se ha limitado a decir que «corresponde a los tribunales, a la Fiscalía, unificar doctrina», en un intento por dilatar los tiempos que ha sido interpretado en realidad como un aval a la ley que está permitiendo las excarcelaciones. Algunas ministras, como María Jesús Montero o Margarita Robles, sí se han mostrado más explícitas. La titular de Defensa ha reprobado además en público los insultos de Irene Montero a los jueces. «Elogio y respeto el trabajo de los jueces españoles. El camino nunca es descalificarles», aseveró en una entrevista en La Sexta.

Lo cierto es que, a las puertas de un ciclo electoral decisivo, las consecuencias de la ley generan mucha inquietud en el PSOE. Dirigentes autonómicos, como el presidente asturiano Adrián Barbón, han instado abiertamente a Sánchez a «corregirla de inmediato». El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, también ha apremiado a revisar la ley «cuanto antes mejor» y ha aseverado que «la soberbia ideológica» no es la solución.