Sánchez calla ante los ataques de sus socios al Rey por pedir lealtad a la Constitución
En su mensaje de Navidad, el Rey realizó una cerrada defensa de la Constitución y pidió lealtad a las instituciones
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Pedro Sánchez ha evitado desautorizar a Podemos, socios en el Gobierno, por su ataque a Felipe VI tras el mensaje de Navidad en el que el Rey reclamó respeto a la Constitución y «colaboración leal» entre las instituciones.
Podemos ha considerado este domingo que el Rey no tiene «legitimidad democrática» para hablar de la crisis institucional provocada por el asalto frustrado del Ejecutivo al Tribunal Constitucional y las cesiones al independentismo.
El secretario de Horizonte Republicano de Podemos, Rafael Mayoral -encargado de valorar el mensaje- ha tachado el discurso de «decepcionante» por, según ha considerado, estar «repleto de vaguedades».
«Hemos visto cómo incluso desde algunos sectores se reclamaba que la jefatura del Estado hablase de la crisis institucional provocada por el Tribunal Constitucional en su interferencia en la actividad del Congreso de los Diputados y de la soberanía popular, pero no puede hacerlo por la ausencia de legitimidad democrática», ha subrayado Mayoral.
Aviso del Rey
En su tradicional intervención televisada, el Rey realizó una cerrada defensa de la Constitución y pidió además el compromiso de las instituciones, a las que reclamó que «ejerciten sus funciones con colaboración leal, con respeto a la Constitución y a las leyes, y sean un ejemplo de integridad y rectitud».
El mensaje ha estado rodeado este año de una mayor expectación, tras una semana de alta tensión política por la supresión del delito de sedición y la rebaja de las penas por malversación, además del intento del Gobierno de modificar las reglas para la elección de magistrados del Tribunal Constitucional.
En el discurso, el Rey reivindicó los principios de la Constitución para «seguir encontrando la unión que nos asegura estabilidad, cohesión y progreso» y alertó de los tres riesgos que, en su consideración, amenazan la democracia española: «La división», «el deterioro de la convivencia» y «la erosión de las instituciones».
Desde Podemos, sin embargo, han rechazado ese llamamiento y consideran que «en un momento tan grave lo importante es entender que todos los poderes del Estado deben estar sometidos a la soberanía popular». En este contexto, ha señalado Mayoral, «la Monarquía tiene un papel difícil que asumir». Según la formación morada, existe una «necesidad de profundizar en la democratización del Estado y en ese camino es evidente que la Monarquía no va a jugar ningún papel que sea útil para las mayorías sociales».
Por su parte, Bildu, otro de los socios preferentes de Sánchez y partido en el que se apoya para sacar adelante su iniciativa legislativa, ha atacado también la «figura impuesta» que, en opinión de la formación proetarra, representa Felipe VI.
«La única vía para conseguir una sociedad más democrática y más igualitaria es alejarse de esa figura impuesta y anacrónica», ha asegurado el diputado Jon Iñarritu, que ha calificado el mensaje de «tostón soporífero».
PSOE
Desde el PSOE han obviado también estos ataques y han realizado una valoración «muy positiva» del mensaje.
«Nos recuerda que, para hacer frente a todos estos desafíos, para poder ayudar de manera continuada a quienes necesitan de los poderes públicos, lo más importante es que garanticemos el buen funcionamiento y la integridad de nuestras instituciones públicas», ha afirmado la presidenta del partido, Cristina Narbona.
Sin darse por aludidos por el mensaje del Rey, desde Ferraz han aplaudido que Felipe VI invite a hacer una reflexión constructiva y un ejercicio de responsabilidad individual y colectiva «precisamente para garantizar que las instituciones públicas son sólidas y pueden garantizar la convivencia en democracia». «Nuestro patrimonio más valioso», ha subrayado Narbona.