España
Elecciones 23J

El PP prepara una ofensiva contra Sánchez por su próximo pacto con Bildu: «Será un referéndum»

El PP redoblará su ofensiva contra Bildu, socios de legislatura de Pedro Sánchez, en estas semanas hasta la celebración de elecciones generales el próximo 23 de julio. Según fuentes de la dirección de Alberto Núñez Feijóo, en Génova está convencidos de que Sánchez tratará de buscar el apoyo de Bildu para ser presidente tras el 23J, incluso perdiendo las elecciones.

En este contexto, a fin de desmontar esa estrategia, los populares exigirán a Sánchez que diga si va a pactar con los proetarras pese a perder las elecciones, si la concesión «será una consulta o referéndum» soberanista, sostienen las mismas fuentes, una vez encarrilada por los socios la puesta en libertad de los presos etarras con la transferencia de Prisiones al País Vasco. «Tablero clarificado», reclaman desde Génova, cuyo primer movimiento tras el 28M ha sido ofrecer gratis sus votos al «constitucionalismo» allí donde sean necesarios para que los batasunos no gobiernen ninguna institución.

Por su parte, el líder de Bildu, Arnaldo Otegi, lanzó este lunes toda una advertencia a Pedro Sánchez sosteniendo que «no hay Gobierno progresista en el Estado español sin el concurso de las izquierdas soberanistas y no hay políticas progresistas en el Estado español si la izquierda soberanista vasca no está en los acuerdos que permiten hacer esas políticas públicas». De esta manera, el dirigente batasuno recalcó que solamente será posible un «nuevo Ejecutivo progresista» con los votos y el apoyo de la «izquierda soberanista vasca». Para Otegi, esa negociación pasa por una consulta. De ahí sus llamamientos a defender el «carácter plurinacional de este Estado» y el «derecho a la libre determinación de los pueblos».

Ante tal escenario, fuentes de la dirección del PP aseguran que piensan ir «hasta el final» con su denuncia sobre los pactos del líder socialista con la formación de Otegi, que ha dicho del propio Sánchez que es «una oportunidad» para «agotar al máximo».

«Bildu no ha hecho los deberes para estar en las instituciones democráticas», enfatizan fuentes de la dirección del PP

Y es que, según destacan fuentes populares, el actual secretario general del PSOE ha sido «el único que ha roto el acuerdo emanado de la Transición y la historia del Partido Socialista», pues ni el ex presidente José Luis Rodríguez Zapatero, que firmó con el PP en el año 2000 el Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo, llegó tan lejos, apuntan. Sánchez «ha incluido a Bildu en la dirección del Estado», lamentan las fuentes.

«Bildu no ha hecho los deberes para estar en las instituciones democráticas. Lo único que ha hecho ha sido aceptar que el Estado le ha ganado la partida a ETA. Nada más. Sin embargo, no ha perdido perdón a las víctimas, sigue hablando de conflicto y se niega a colaborar para esclarecer 370 crímenes de ETA», enfatizan desde la cúpula del PP.

La pasada campaña de las elecciones municipales y autonómicas del 28 de mayo estuvo marcada por la inclusión de 44 etarras en la listas de Bildu, siete de ellos con delitos de sangre. Al silencio de Pedro Sánchez durante varios días y al vertiginoso cambio de postura de algunos de sus barones, que pasaron en horas de defender la presencia de etarras en la candidatura de Bildu a cuestionarla, siguió el anuncio de esos siete etarras con delitos de sangre de no recoger el acta de concejales el próximo 17 de junio si salían elegidos. Dos de ellos lo fueron.

Reforma

De fondo, también estuvo el debate de la ilegalización de Bildu, que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, pidió abiertamente, mientras que Génova abogó por una reforma de la Ley Electoral para que los etarras condenados no puedan ser candidatos, entre ellos el propio Otegi. Por ello, las fuentes citadas de la dirección nacional del PP subrayan que «no podemos aceptar que haya etarras en las instituciones sin haber pedido perdón a las víctimas y sin haber reparado el daño causado».

De hecho, la proposición no de ley que el PP llegó a registrar el pasado mayo en el Congreso -y que decayó con el adelanto electoral-, instaba al Gobierno a «romper de manera inmediata y definitiva los acuerdos que mantiene actualmente y a no promover pactos, ni establecer ningún tipo de acuerdos de gobernabilidad o de cualquier otro tipo, con partidos políticos que tengan en sus estructuras o que hayan incluido en sus candidaturas para cualquier proceso electoral, a personas que hayan sido condenadas por delitos de terrorismo, con independencia de que hayan cumplido sus penas».

Durante la campaña, el ex presidente del Gobierno José María Aznar ya alertó en un acto en Bilbao de que otro mandato de Sánchez puede suponer una «suelta general de presos» y una «consulta» soberanista en el País Vasco.