España
Caso Neurona

Podemos quiere evitar que se investiguen los contratos de trabajadores de Neurona

Podemos no quiere que se practiquen nuevas diligencias en el caso Neurona, que investiga el desvío de 363.000 euros de fondos públicos a la consultora mexicana que da nombre a esta causa. El partido morado se opone, por ejemplo, a que Neurona Consulting S.A. aporte los contratos de trabajadores que supuestamente prestaron sus servicios durante la campaña electoral de abril de 2019. Tampoco quiere que la consultora remita los permisos o visados de trabajo de estos empleados, ni que entregue la contabilidad completa de los ejercicios 2019 y 2020.

En un escrito al que ha tenido acceso OKDIARIO, los morados impugnan el recurso de apelación formulado por la acusación popular, que reitera ante el titular del Juzgado de Instrucción 42 de Madrid la práctica de diversas diligencias encaminadas a esclarecer «la veracidad de que existen o no trabajadores de Neurona que desarrollaron labor profesional en las elecciones generales del 28 de abril de 2019».

De hecho, la acusación popular solicita que la consultora mexicana remita los contratos laborales o mercantiles que acrediten la relación de los empleados con los servicios prestados en la campaña electoral de 2019 y, en concreto, los contratos de Waldemar Aguado Butanda, Franco Bertozzi y Alejandro Neyra Pinzón. Todo ello con la finalidad de verificar, según la acusación, no sólo la relación laboral o mercantil, sino también «el objeto de las prestaciones contratadas, duración de los contratos y sobre todo el coste de los empleados». La acusación pide, además, ante la sospecha de que «todo es ficticio» porque «no existe ninguna prueba objetiva de que realmente existan trabajadores de Neurona», los permisos de residencia o trabajo o los visados de los empleados.

Por otra parte, la acusación pide y Podemos se opone a que Neurona Comunidad S.A. remita documentación acreditativa de que es una filial de Neurona Consulting SA. Y lo mismo sucede con la petición de requerir a las empresas Neurona Consulting S.A. y Creative Advice Interactive Group S.A. – la compañía a la que fue a parar el dinero- la contabilidad completa de los ejercicios de 2019 y 2020.

El partido que dirigía Pablo Iglesias también pretende evitar que, en la pericial encargada para saber si la formación política pagó un precio razonable por los trabajos de la consultora, se incluya no sólo el precio o coste de los servicios prestados, sino además el valor de mercado de los 48 diseños gráficos realizados por Waldemar Aguado Butanda, el trabajo de segmentación y  la cobertura de los 7 actos electorales.

Esta última, la prueba pericial, así como el interrogatorio de dos de los socios de la consultora Neurona, son dos de los flecos pendientes de una instrucción cuyo plazo concluye el próximo 28 de enero, y que Podemos ha solicitado no prorrogar. El partido morado, a quien un informe de la UDEF de la Policía Nacional acusaba de poner trabas en la investigación, pretende dar carpetazo a este caso sin que el juez practique nuevas diligencias que puedan arrojar luz sobre la investigación del desvío de 363.000 euros de fondos públicos a Neurona.